El intendente de la Guardia Urbana, Domènec Escarré, ha detallado en una rueda de prensa como la superilla literaria de Sant Jordi repercutirá los próximos días en el tráfico del centro de Barcelona. Las calles se empezarán a cortar este sábado a las 22 horas, para que se puedan empezar a montar las paradas a las 6 horas de domingo, cuando se celebrará la fiesta de Sant Jordi. La prohibición de estacionar a la superilla literaria, tanto en las aceras como la calzada, empezará antes, a las 8 horas de sábado. La normalidad no se recuperará por completo hasta las 4 de la madrugada de lunes.
Estos cortes de tráfico se traducen en el hecho que no podrán circular por el interior de la superilla ningún vehículo privado, bicicletas ni vehículos de movilidad personal, entre otros. Además, se paralizará el funcionamiento de las estaciones de Bicing. Las calles afectadas son todos los que se encuentran entre la Gran Via de las Cortes Catalanes y la avenida Diagonal y las calles de Pau Claris y Balmes, así como la parte de bajo de la calle de Gran de Gràcia y el emblemático paseo del coro de Barcelona: la Rambla. A partir de las 21 horas de domingo empezará el dispositivo para normalizar la circulación de la zona, pero la situación no quedará completamente normalizada hasta las 4 horas de lunes.
275 agentes de la Guardia Urbana
Escarré ha detallado a la rueda de prensa que 275 agentes de la Guardia Urbana y 330 auxiliares trabajarán durante la celebración de Sant Jordi en Barcelona movilizará. También se contará con 230 barreras de hormigón New Jersey.
Por su parte, los representantes de los gremios de Floristas, Libreros y Panaderos prevén que se vivirá una fiesta de “recuerdo”. Será, han dicho, como Sant Jordi de “toda la vida”. Barcelona contará, concretamente, con 4.100 puntos de venta de flor, casi 1.000 de libros y unos veinte panaderos.
