El gran parque infantil que hacía meses que estaba en construcción ya ha abierto las puertas porque todos aquellos niños y niñas que quieran ir a jugar puedan hacerlo. El parque que se encuentra en el antiguo bloque 12 de Can Batlló, situado en el barrio de la Bordeta, al distrito de Santos-Montjuic, dispone de diferentes áreas de juegos que ofrecen múltiples alternativas de ocio, como por ejemplo columpios, camas elásticas o sorrals, entre otros. Pero destaca la joya de la corona: uno de los toboganes más grandes de la capital catalana con más de once metros de longitud.
El parque se caracteriza por el gran tobogán metálico. Un tobogán de cinco pisos por los cuales se tiene que subir por una escala que se encuentra en el centro del cilindro -de 9 metros de altura– desde donde sale el tobogán. Hay tres medidas diferentes, la grande con curvas que hace más de once metros para los más atrevidos, y dos de más pequeños que salen desde el primer piso para los más pequeños de la familia. Esta mañana, aprovechando la apertura décimas de familias se han acercado a esta nueva equipación municipal de más de 1.000 m² para disfrutar del día y estrenar este nuevo tobogán. Según aseguran desde el Ayuntamiento, el parque restará cerrado durante las noches.
Varios miembros de los comunes en Barcelona se han hecho eco a través de las redes sociales. Un ejemplo es el tuit de la segunda teniente de alcaldía, Janet Sanz, que asegura que el próximo martes e irá con el partido liderado por Ada Colau «para probarlo». Hay que recordar, pero, que desde el 4 de abril están prohibidas las inauguraciones de obras públicas. Algunos usuarios de Twitter denuncian que la fuerza política de Sanz está «camuflando la inauguración de un parque infantil haciéndola pasar por una prueba».
Un descubrimiento centenario
Las obras de Can Batlló han permitido descubrir los restos arqueológicos de una curtiduría del siglo XIX. Según fuentes de el Instituto de Cultura de Barcelona (ICUB), se trata de una curtiduría previa a la fábrica textil que estaba construida junto al que ahora es el parque infantil de Can Batlló.
