Asegurar que la pandemia ha supuesto un antes y uno después para la movilidad de las ciudades es un poco ariesgado. En todo caso, los datos muestran como cada vez más gente se decanta por desplazarse en bicicleta. Por eso, en los últimos años, el Ayuntamiento de Barcelona ha ampliado con fuerza la red de carriles bici para satisfacer la demanda. Al mismo tiempo, los datos del Bicing, por ejemplo, no han parado de crecer. Actualmente, sin ir más lejos, se hacen 1.239.482 desplazamientos mensuales con este servicio. Ahora bien, no todos los barrios tienen la misma afición, tal como demuestra un estudio del Bicicleta Club de Cataluña (BACC).
Los lugares con más destinos
El estudio citado analiza dónde empiezan y dónde acaban los desplazamientos. Así, se demuestra que los barrios con más gente ciclista, de donde más bicicletas salen cada día, son la Vila de Gràcia (6,1%), las Cortes (5,5%), Sants, Sant Antoni, y Sarrià (3%). Los datos no coinciden con los destinos más comunes. En este caso, dos zonas cogen la delantera con diferencia. Por un lado, el barrio del Poblenou (un 6,7% de destinos), donde se ubica una de las áreas empresariales más grandes de Barcelona, el 22@. También la zona de Sarrià, con la misma cifra de desplazamientos, ocupa el primer lugar del ranking. El Eixample, Gràcia o Poble-sec son otros barrios con bastante afluencia (entre 3,5 y 5,5%).
Una red de carriles bici desigual
El estudio cruza estos datos con la red de carriles bici de Barcelona. La conclusión principal es que el centro de Barcelona es la zona con más afluencia de bicicletas tiene durante el día y a la vez la zona con una red más buena y segura. En cambio, la red empieza a «desaparecer y fragmentarse» en los barrios más periféricos. En estas zonas se observa, según el estudio, carriles bici «discontinuos, cruces inseguros y tramos desconectados». A pesar de que el uso de la bicicleta es menor en estas zonas, hay que recordar que algunos de los barrios destino son en la periferia.
