La lluvia ha consumado el milagro y ha hecho acto de presencia con mayúsculas este domingo en Barcelona. Después de meses sin registrar chubascos destacables, las precipitaciones se han apoderado de la capital catalana esta tarde, contribuyendo de este modo a aligerar levemente la crítica situación de sequía que vive tanto la ciudad como buena parte del territorio catalán.
La previsión es que estos chubascos se alarguen durante todo el anochecer y la noche de este sábado y que aflojen de madrugada. Según los datos facilitados por el Servicio Meteorológico de Cataluña (Meteocat), la lluvia tendría que volver a hacerse patente a primera hora de la mañana de este lunes y se tendría que mantener de manera más o menos intermitente durante casi toda la jornada hasta el anochecer, coincidiendo con las últimas horas de la operación retorno después de este puente de tres días. Estas precipitaciones, pero, no se traducirán en una fuerte bajada de los termómetros, que se seguirán situando alrededor de los 18 y 19 grados durante buena parte del día.
De cara al martes, la situación meteorológica tendría que mejorar y mantenerse estable con buen tiempo y temperaturas superiores a los 20 grados al menos hasta el sábado, cuando el tiempo empezará a cambiar otra vez y se podrían registrar nuevos chubascos que tendrían que perpetuarse durante las jornadas del domingo y del lunes.
Nuevo récord meteorológico batido este abril
La ciudad ha batido este mes de abril un nuevo récord meteorológico vigente desde hace once años. Este sábado 29 de abril al mediodía la temperatura registrada a la estación de radiosonda de la ciudad llegó a marcar 19,6 grados a 850 hPa (unos 1.500 m de altitud), un valor plenamente veraniego y 12 grados superior a la media climática de esta época del año.
Se da la circunstancia que estos casi veinte grados registrados son la temperatura más alta detectada nunca por esta estación en sus 25 años de historia, superando de este modo los 18,6 grados que se lograron el 27 de abril del 2012, la cifra que hasta ahora marcaba el umbral.
