Tot Barcelona | Notícies i Informació d'actualitat a Barcelona
La iluminación ‘comercial’ de la Catedral contradice el criterio municipal

La Catedral de Barcelona es probablemente uno de los monumentos más fotografiados de la ciudad. Su icónica fachada neogótica ha protagonizado álbumes de fotos de centenares de miles de turistas a lo largo de los años y es una de las paradas obligatorias en la ruta histórica por núcleo antiguo de la capital catalana. Desde el pasado mes de junio, pero, tanto los visitantes como los barceloneses que se acercan a admirar el edificio se lo encuentran presidido por una gran lona publicitaria que cubre todo el cimborrio, donde se están ejecutando unas obras de rehabilitación. Este anuncio de grandes dimensiones de la compañía Samsumg ya causó bastante revuelo cuando fue colocado el verano pasado, pero ahora ha vuelto a ser objeto de otra polémica por el sistema de luces con el cual se ilumina al atardecer.

La potente iluminación nocturna del edificio eclesiástico había pasado desapercibida hasta hace unas semanas, cuando varios profesionales del mundo del diseño y la iluminación se hicieron eco a través de las redes sociales de una fotografía donde se ve el aspecto que presenta la fachada cuando se ponen en funcionamiento los focos que se proyectan sobre esta lona. La imagen corrió como la pólvora entre diferentes miembros del sector e incluso traspasó fronteras, llegando a manos de algunos referentes internacionales del colectivo. La gran mayoría de voces coincidían al apuntar la importante contaminación lumínica que provocan estas luces y la ausencia de cualquier componente estético en la instalación, bastante grandilocuente y visible desde mucha distancia.

Aun así, esta iluminación no solo parece responder a un interés puramente comercial, sino que también contradice la normativa municipal que fija los estrictos criterios para iluminar algunos monumentos de la ciudad como este. Varias fuentes del sector consultadas por el TOT Barcelona apuntan que los proyectos para poner luz a edificios que tienen cierto nivel de protección patrimonial acostumbran a estar marcados por unas duras directrices técnicas que obligan A los profesionales a actuar con gran cuidado a la hora de diseñar estos sistemas de iluminación. En este sentido, parece evidente que estos preceptos no se han tenido en consideración en la instalación del alumbrado de este anuncio publicitario, tal como denuncian las mismas voces.

Detalle de la lona publicitaria que cubre el cimbori de la Catedral / A.R.
Detalle de la lona publicitaria que cubre el cimborrio de la Catedral / A.R.

Un proyecto completo guardado en un cajón

La situación es todavía más flagrante si tenemos en cuenta que el Ayuntamiento tiene desde finales del 2016 guardado en un cajón un proyecto completo para renovar la iluminación artística de la Catedral. Este planeamiento se basa en la actualización y optimización del sistema que estuvo vigente desde los años setenta hasta poco antes de la reforma del templo que se inició en 2004 y tenía el objetivo de recuperar la imagen icónica que proyectaba el edificio antes de la remodelación, pero reduciendo al máximo el consumo energético de la instalación. El autor de este proyecto fue un equipo encabezado por Alfred Sá, que fue el ganador de un concurso entre diseñadores que impulsó el ejecutivo liderado entonces por Xavier Trias. Con el cambio de gobierno después de las elecciones, la iniciativa quedó en punto muerto hasta casi un año después, cuando el consistorio formalizó la contratación de sus servicios para redactar este planeamiento, que se entregó a finales del 2016 y que entonces preveía un coste aproximado de 700.000 euros, un importe que ahora se tendría que actualizar.

«La iluminación de los años setenta estaba colocada con mucho criterio, pero ya estaba obsoleta porque utilizaba lámparas incandescentes y halógenas. Con el nuevo proyecto queríamos respetar la idea del sistema antiguo y la tradicional fotografía del templo con una luz cálida y suave, actualizando la tecnología y evitando crear contaminación lumínica», asegura Sá en una conversación con el TOT Barcelona. El diseñador explica que para poder elaborar la propuesta se entrevistaron con el Arzobispado de Barcelona para conocer qué imagen del edificio querían proyectar y tuvieron acceso tanto a las fotografías como al listado de los proyectores que se utilizaron hasta principios de los años 2000. Además, el equipo también analizó los proyectores de grandes dimensiones que se instalaron en el tejado de la Catedral antes de la reforma del 2004.

Planos y fotografías del proyecto olvidado para renovar la iluminación de la Catedral / Alfred Sá
Planos y fotografías del proyecto olvidado para renovar la iluminación de la Catedral / Alfred Sá

Todo ello permitió redactar un proyecto definitivo que reducía considerablemente la potencia del alumbrado instalado, que pasaría de más de 200 kW a solo unos 14 kW. De hecho, Sá considera que este ahorro energético podría ser todavía más grande si los cálculos y el planeamiento se adaptaran a la tecnología vigente hoy en día, incorporando las mejoras de la tecnología LED y aplicando técnicas punteras que su equipo utiliza y que permiten reducir la contaminación lumínica a su mínima expresión. Aun así, la propuesta hace casi siete años que está guardada en un cajón a la espera que el ejecutivo apueste por retomar la renovación de la iluminación de la Catedral.

Imagen virtual de cómo quedaría la Catedral con el sistema de iluminación renovado / Alfred Sá
Imagen virtual de cómo quedaría la Catedral con el sistema de iluminación renovado / Alfred Sá

Salvoconducto para saltarse los criterios técnicos

La existencia de este proyecto profesional -que ha recibido elogios y reconocimiento de varios profesionales del sector a escala internacional- no acaba de encajar con la permisividad municipal en cuanto al alumbrado de la lona. Precisamente, uno de los puntos que más comentarios ha generado entre el colectivo es el hecho que, en vez de impulsar una nueva instalación de luz para mejorar la imagen del edificio en su conjunto, el consistorio permita una iluminación que genera un alto impacto visual solo para hacer visible el anuncio por la noche. Además, los profesionales del diseño y la iluminación denuncian que estos criterios técnicos tan estrictos no se han tenido en consideración a la hora de colocar este alumbrado, que tal como ha podido comprobar de primera mano el TOT Barcelona provoca una gran contaminación lumínica. «Si se tiene que iluminar la lona por la noche, entendemos que se tiene que hacer bien. No puede haber tanto control y normativa para después instalar unos proyectores gigantes que todo el mundo puede ver y que molestan mucho», añaden.

A pesar de la polémica, Sá espera que una vez retirada la lona y pasadas las elecciones municipales se pueda sacar del cajón el planeamiento para actualizarlo y aplicarlo al templo tal como estaba previsto, respetando la imagen tradicional del edificio, pero al mismo tiempo potenciando su belleza y magnificencia.

El sistema de luces que ilumina la entrada principal de la Catedral, mucho más tenue que la del cimbori / A.R.
El sistema de luces que ilumina la entrada principal de la Catedral, mucho más tenue que la del cimborrio / A.R.

Aviso a los responsables por incumplimiento de la normativa

Fuentes municipales consultadas por el TOT Barcelona apuntan que en el convenio de autorización para colocar la lona publicitaria se exige cumplir con la normativa de contaminación lumínica, que prohíbe instalar luces en la parte inferior y en los laterales tanto de la lona como del andamio. Estas restricciones tienen el objetivo de evitar la «dispersión de luz y el aumento de contaminación lumínica cenital», además de no permitir la intrusión lumínica en el entorno doméstico y de minimizar las molestias y los perjuicios que la instalación en sí pueda causar.

Teniendo en cuenta estos criterios, el Ayuntamiento ya se ha puesto en contacto con el operador publicitario para que redirija los focos y disminuya la intensidad de la iluminación. Por su parte, el operador se ha comprometido a aplicar los cambios de manera «inmediata» para corregir la iluminación. El consistorio hará seguimiento del caso para comprobar que se está cumpliendo la normativa.

Doble aportación de más 54.000 euros

Hay que recordar que, para convertir el andamio de la Catedral en un espacio publicitario, Samsung ha realizado hasta dos pagos diferentes. Por un lado, la compañía ha hecho una contribución al Arzobispado para rehabilitar el cimborrio y, por la otra, ha abonado una tasa al Ayuntamiento por el impacto visual, que se destina a obras de mejora del paisaje urbano. La compañía ha invertido al menos 53.943 euros para tener derecho a seis meses de instalación del anuncio, un dinero que se tenía que destinar a la reforma de las medianeras del Mas Guinardó.

Nou comentari

Comparteix

Icona de pantalla completa