Los vecinos del barrio del Turó de la Peira han salido a la calle este martes para pedir que vuelva el servicio de pediatría al barrio, que en estos momentos se tiene que desplazar al CAP de Río de Janeiro. Medio centenar de personas han protestado por una situación que se ha enquistado todavía más con la pandemia. Desde que el Departamento de Salud los sacaron hace cinco años, aproximadamente, la opción más próxima que tienen los vecinos para ir al pediatra alegando que no hay suficientes médicos.
La portavoz vecinal Teresa Viladoms hace unas semanas al TOT Barcelona: «Hemos luchado para recuperarlo, pero nos dicen que no hay bastante médicos». Además, apuntaba el barrio vecino que bastante lejos de algunos puntos del Turó de la Peira, lo cual puede generar situaciones de cierto peligro. «Imagínate que tienes una urgencia. Según el punto del barrio donde te encuentres, puedes tardar 30 minutos andando», apuntaba Viladomat. En el barrio hay 3.000 niños y adolescentes que, en situaciones normales, estarían asignados al pediatra que ya no está.
«Hemos visto procesos de automedicación»
Después de la manifestación, Oriol de la Villa, uno de los vecinos afectados que participó en la protesta, explicaba en el programa
Problemas más allá de pediatría
Las quejas relativas al CAP van más allá del servicio de pediatría. Desde el barrio aseguran que la línea 122 del bus no tiene rampas que faciliten el acceso a personas con movilidad reducida. Es cierto que el inicio y final del trayecto es muy cerca del CAP del Turó de la Peira, hecho que consideran insuficiente. Por ejemplo, diferentes voces vecinales consultadas por el TOT Barcelona asegura que «la gente mayor no puede subir si va con silla de ruedas o muletas».