La familia Rahmatinia vive horas críticas. Estos refugiados procedentes del Kurdistán están a un paso de ser deportados por las autoridades españolas y esperan el fatal desenlace desde Barcelona, la ciudad a la cual llegaron hace 12 días. Su abogado ha presentado una petición de medidas cautelarísimas que la Audiencia Nacional ha desestimado, abocándolos a volver al lugar del cual huían.
El Estado español ve lagunas e incoherencias en el recurso
Cuando llegó al Aeropuerto de Barcelona, la familia presentó una petición de asilo que fue denegada en una primera instancia, pero el abogado de la familia presentó un recurso a la Audiencia Nacional, un recurso que desde la institución española ven con «lagunas e incoherencias» un hecho por el cual se ha mantenido la denegación de asilo, según informa la ACN.
La Audiencia Nacional no ha encontrado motivos que puedan impedir la deportación de esta familia de refugiados kurdos y, como informan fuentes policiales a la ACN, puede ser que la vuelta, forzada, de esta familia a su país de origen se podría producir esta misma tarde. El Parlamento de Cataluña a través de su presidenta, Anna Erra ha pedido que la orden de deportación quede anulada.
La familia Rahmatinia argumenta que es un refugiado político.
Llegaron hace 12 días a la ciudad de Barcelona y pidieron asilo político a las autoridades españolas, argumentando que Mohammad Rahmatinia es miembro del Partido Democrático del Kurdistán de Irán, un partido que está ilegalizado en su país, y que había estado condenado a 15 años de prisión. El hombre, también asegura que ha participado en las manifestaciones en apoyo del movimiento Mujer Vida Libertad, unas protestas que acabaron con la muerte de una joven que no llevaba el velo islámico, como indican las autoridades de la República Islámica.
La familia decidió huir de Irán el pasado cinco de septiembre, antes de la conmemoración de estas protestas y de la muerte de Mahsa Gina Amini, la joven anteriormente mencionada. Según dicen desde la familia, las autoridades islámicas habían aumentado su seguridad con más controles y el cabeza de familia había sido identificado por estas.