Veinte años después, Barcelona rinde homenaje al esvoranc del Carmel oficializando su nombre en la zona cero de la tragedia que sacudió el barrio y la historia de la construcción en la ciudad. La ponencia de Nomenclátor ha hecho oficial el nombre de plaza del Esvoranc para la zona que se encuentra entre la calle de la Conca de Tremp, la calle de Sigüenza y el pasaje de Calafell. Es el paso definitivo para renombrar una zona que popularmente ya se conocía de esta manera. Desde el Ayuntamiento remarcan que este paso ayuda a preservar la memoria del derrumbe, motivado por las obras de la línea 5 del metro. El agujero de 20 metros de diámetro y 25 de profundidad obligó al realojo de cientos de familias.
En este espacio del esvoranc todavía se está construyendo el edificio de viviendas de alquiler que impulsa el Instituto Catalán del Suelo (Incasol) de la Generalitat. Se comenzó a levantar en el otoño de 2023, 17 años de retraso desde que se había anunciado en 2006. La crisis del esvoranc trastocó el día a día de los vecinos, que aún recuerdan las heridas que dejó aquel suceso. “No murió nadie, pero aquello hizo mucho daño”, recordaban en Tot Barcelona algunos de los vecinos el pasado enero.

Veinte años de una crisis social y política
La crisis también afectó al comercio de proximidad, al que le cuesta aún salir adelante años después. El tejido comercial de la zona recuerda que enlazaron la crisis del esvoranc con la crisis económica de 2008 y poco después la pandemia de la Covid-19. La portavoz de la asociación Carmel Comerç, Encarna Puig, destacaba en un reportaje del TOT sobre el vigésimo aniversario que muchas personas desplazadas “eran clientes que no volvieron al barrio” y que eso ha marcado los años posteriores. La crisis también saltó a la política, con el entonces presidente de la Generalitat, Pasqual Maragall, acusando a los líderes de Convergència de cobrar comisiones ilegales en las obras públicas con la famosa frase «ustedes tienen un problema, que se llama 3%».

