Los vecinos del Turó de la Peira —distrito de Nou Barris— han protagonizado muchas luchas para hacer del barrio un lugar mejor donde vivir. Una de las que todavía no ha acabado es la que tiene el objetivo de recuperar el servicio de pediatría, que dejó de ofrecerse en el CAP del Turó de la Peira durante la pandemia. Así lo explica al TOT Barcelona una integrante de la plataforma Recuperemos Pediatría en el Turó, Maria de Mar Serrano, quien también dice que desde entonces la opción más próxima para ir al pediatra es el CAP Río de Janeiro, situado en el barrio de Porta. «Está a 2 kilómetros de distancia de algunas partes del barrio», avisa. Sobre esta situación también hablaron el pasado mes de febrero al TOT miembros de la Asociación de Vecinos del Turó de la Peira. Señalaron, entre otros, que se podía tardar 30 minutos andando. «Imagina que tienes una urgencia», alertaron entonces. Serrano añade que en caso de ir de urgencias se puede tardar unas cuántas horas en conseguir una visita.
En cuanto a las características de la zona, Serrano añade que el hecho que esto pase en un barrio de rentas bajas y donde parte de su población tiene trabajos precarios, puede hacer que algunas personas no tengan tiempo de ir hasta el barrio de Porta y, por lo tanto, prescinden de ir al CAP Río de Janeiro. «Este es uno de los últimos lugares de la ciudad donde se necesita un recorte así. Hay mucho de paro, problemas de salud mental infantil sin tratamientos, malnutrición…», alerta.

El motivo inicial por el cual se dejó al Turó de la Peira sin servicio de pediatría, recuerda Serrano, fue la covid. «Primero nos dijeron que en el CAP no había suficiente ventilación y que era una medida provisional. Después, pero, dijeron que era por falta de pediatras y que era mejor tenerlos juntos en el CAP de Río de Janeiro», detalla. Para revertir esta situación, en los últimos años los vecinos han tenido diferentes reuniones con las administraciones, pero no han conseguido ninguna mejora. El último encuentro lo tuvieron este miércoles con directivos del Instituto Catalán de la Salud (ICS), que repitieron el mismo argumento. «Dicen que con esta metodología lo hacen mejor», indica sin estar convencida de esta medida. «No deja de ser un recorte encubierto», añade.
Autobús sin rampas
Desde la Asociación de Vecinos del Turó de la Peira también explicaron el pasado febrero que el autobús de barrio, la Línea 122, no tenía rampas que facilitaran el acceso a personas con movilidad reducida. A pesar de que, según aseguraron, su inicio y final era muy cerca del CAP del Turó de la Peira. “La gente mayor no puede subir si va con silla de ruedas o muletas”, avisaron.