Si no hay ningún pacto rocambolesco, Xavier Trias volverá a ser alcalde de Barcelona 8 años después, tras las elecciones del pasado domingo. Ante estos resultados, la patronal de la gran empresa catalana, Foment del Treball, ha celebrado, con discreción, el cambio de gobierno en la capital catalana. En este sentido, Josep Sánchez Llibre, ha asegurado que quiere que las fuerzas políticas se acaben de poner de acuerdo, pero que «todo indica que se inicia un nuevo ciclo económico y político en Barcelona», puesto que los ciudadanos han votado a favor del cambio. A propósito de esto, el presidente de Fomento ha añadido que a partir de ahora la ciudad volverá a ser la ciudad del Sí al progreso económico y no la ciudad del No que ha representado el consistorio de Ada Colau los últimos 8 años.
A pesar del aval de la patronal, Trias ya hace días que insiste en que, a pesar de ser el ganador, tiene el deber de ser “consciente que hay otra gente que ha obtenido buenos resultados y se tiene que tener en cuenta para gobernar y gobernar bien la ciudad” y que, por lo tanto, todavía tendrá que luchar para llegar a San Jaime. “El que no tiene discusión es que mi candidatura ha ganado, y el que espero es el que decían muchos: Que quién gana es quien tiene que ser el alcalde, para que la gente cumpla sus palabras”, añadió el candidato durante su visita a la reunión del Círculo de Economía este martes.
En cuanto a la posibilidad de un pacto entre comunes, ERC y PSC para gobernar el Ayuntamiento – que ya se ha diluido en las últimas horas- Trias señaló que lo encara la alcaldesa y candidata de los comunes, Ada Colau, “está acostumbrada a hacer pactos tan extraños como intentar ser ella alcaldesa con el señor Manuel Valls”. Una opción que no descarta, pero que necesitaría la complicidad de ERC.