El líder de ERC en el Ayuntamiento de Barcelona y candidato de la formación a la alcaldía, Ernest Maragall, asegura que no tiene ninguna garantía que el presunto espionaje que habría sufrido durante las elecciones municipales del 2019 no se esté repitiendo este 2023. Así lo ha asegurado en una comparecencia conjunta con el presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, con motivo del encuentro con los eurodiputados que lideran la misión de la Eurocámara que investiga el uso de software como Pegasus en la Unión Europea.
«Cuatro años después volvemos a estar en la misma situación, soy candidato a la alcaldía de Barcelona, pero continúo sin tener garantías ni seguridad respecto al ejercicio de mis derechos políticos, civiles y personales. Sigo sin saber si esto se está repitiendo o no porque no hemos obtenido la mínima protección ni evidencia que se están protegiendo nuestros derechos», ha asegurado Maragall, que ha acusado la justicia española de mirar «hacia otro lado, aplazando y negando la evidencia».
En este sentido, el líder republicano ha reclamado «tener justicia» y tomar medidas para garantizar que el espionaje no se vuelve a repetir. «El silencio clamoroso (del gobierno español) es la evidencia más grande del carácter político (del espionaje)», ha reivindicado.
Un episodio más de la «guerra sucia» contra el independentismo
Por su parte, Aragonés ha denunciado en el encuentro con los eurodiputados que este presunto espionaje es «otro episodio de la guerra sucia» del Estado contra el independentismo. «Algunos creen que la defensa de la unidad de España está por encima de los derechos fundamentales», ha dicho el presidente de la Generalitat, pidiendo «el amparo y respuesta» que ha dicho no estar recibiendo por parte de las autoridades españolas. A su vez, la consejera catalana de Acció Exterior, Meritxell Serret, ha denunciado la dimensión transfronteriza de su caso, puesto que en el momento en el cual se habría producido este seguimiento residía en Bélgica.
