El Gremio de Hoteles de Barcelona ha marcado territorio ante la llegada de un nuevo gobierno al Saló de Cent. El presidente del gremio, Jordi Clos, ha pedido al nuevo alcalde, Jaume Collboni, que flexibilice el Plan Especial Urbanístico de Alojamiento Turísticos (PEUAT), normativa que regula el sector, para que se puedan abrir hoteles «especiales y singulares» en el centro de la ciudad. El gobierno de Ada Colau restringió la creación de nuevos hoteles con el objetivo de reducir el impacto turístico en la capital catalana. En una entrevista en EFE, Clos ha pedido ahora dejar atrás esta etapa para poder crear «hoteles joya» en el centro turístico de Barcelona.
Clos ha querido dejar claro que no están pidiendo «hacer hoteles de 400 habitaciones en el centro de Barcelona», sino la posibilidad de transformar «algunas auténticas joyas del siglo XVII que están abandonadas» en hoteles de 20 habitaciones. Según el empresario, que ha puesto de ejemplo algunos edificios del barrio Gótico, se trata de una maniobra que «resultaría muy atractiva para un tipo determinado de turismo».

Confianza en la «buena relación» que hay con Collboni
No es la única carpeta que el Gremio sitúa sobre la mesa del nuevo alcalde. Clos ha sido claro pidiendo a Collboni que vuelva a trabajar por recuperar la actividad turística de Barcelona, la cual considera que ha sido «penalizada» durante los mandatos de Colau. Los cálculos del gremio son claros: el socialista, dicen, tiene que legislar de tal forma que el turismo vuelva a ser el 14% del PIB de la capital. En este sentido, el PSC se ha definido como el «partido amigo del crecimiento económico» durante la campaña electoral, en una clara referencia a sus exsocios de gobierno. El sector se coge a estas palabras y a la «buena relación» que mantienen con la exregidor de turismo, ahora nuevo alcalde. «Conoce el turismo de la ciudad y creo que coincide bastante con el nuevo criterio», ha mantenido el presidente de los hoteleros.