El Bar Tomàs de Sarrià -calle Major de Sarrià, 49- ha recibido un premio al Hostalero Magnífico de una ruta por bares más especiales que organiza la cervecera San Miguel. En concreto, se han reconocido sus patatas bravas. Ahora bien, si queréis probarlas, tened en cuenta que es un local concurrido y que sus horarios son muy acotados: abre a los mediodías, de 12.30 a 16 h, y al atardecer, de 18.30 a 22 h. Y el domingo bajan la persiana, como por ejemplo, también en Semana Santa, que cierran ocho días por descanso del personal. Una restricción que todavía hace más atractivas a la bravas más difíciles de conseguir. Además, se sirven en un pequeño plato, nada de grandes cantidades. De hecho, sus bravas no necesitan galardones para ser famosas, aparecen reseñas de turistas internacionales y han sido reconocidas en varias ocasiones. Pero son también los barceloneses los que se derriten para probarlas, y no solo los vecinos de Sarrià.
Bravas con receta secreta
¿Cómo son las bravas de Tomàs? Según explican en su web, «están cortadas con la irregularidad propia de los cortes hechos a mano, el dorado que nos ofrece el aceite de oliva y el tiempo perfecto de frito». En cuanto a la salsa, pueden ser bañadas sutilmente «por la salsa de alioli tradicional, con el ajo como alimento clave», o con salsa picante, «con una receta casera y, por supuesto, secreta, de la cual se habla por su aromatizado aroma y suave aunque consistente sabor», detallan.
El premio al Bar Tomàs es el punto de arranque de la tercera edición de Ciudades Magníficas que, organizado por la cervecera San Miguel, ofrece una ruta por bares y restaurantes de la ciudad de Barcelona, y también en Lleida, Valencia, Bilbao, Burgos, Málaga, Pamplona y San Sebastián. En Barcelona, unos cincuenta establecimientos se han unido a la ruta, que se alargará hasta el 2 de julio y acabará con una votación popular que elegirá el mejor platillo de cada restaurante.