La plataforma Defensem Can Raventós ha denunciado que el Ayuntamiento de Barcelona puede permitir la construcción de pisos en los jardines de Can Raventós, una masía catalogada como parte del patrimonio de Barcelona. Según esta entidad, el gobierno de Jaume Collboni ha llegado a un preacuerdo con la inmobiliaria Corp para la edificación de más de 1.600 m² de techo en los jardines del recinto. A finales del mes de mayo pasado, el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) anuló el plan especial urbanístico para levantar viviendas de lujo. El TOT Barcelona analizó a fondo el caso el pasado julio en un artículo titulado El callejón sin salida de Can Raventós: un intercambio para saldar la disputa judicial. El Ayuntamiento dice que aún se está trabajando en el acuerdo definitivo.
Según un comunicado de la plataforma de este jueves, el Ayuntamiento informó a los vecinos del preacuerdo con Corp el pasado 10 de febrero. Este pacto propone un intercambio urbanístico a través del cual el consistorio compraría la masía de Can Raventós (con una superficie de 424,85 m² de suelo y 1.065,55 m² construidos) y una parte del jardín, concretamente 1.200,98 m², «el 63,4% del espacio verde actual», subraya la entidad. Por otro lado, la inmobiliaria se quedaría la propiedad del bloque de la calle de Bonaplata, con edificios que se destinarían a vivienda, «con una franja de 5 metros de jardín privado dentro de los 10 metros de separación que fija la ficha del Catálogo de protección del patrimonio, y ni siquiera teniendo que asumir el 30% de vivienda social» en el emplazamiento. Se trata de una normativa municipal aprobada en tiempos de Ada Colau que reserva el 30% de las nuevas promociones y grandes rehabilitaciones a pisos públicos y que Collboni quiere revisar.

La masía se puede convertir en un equipamiento público
Si bien la plataforma Defensem Can Raventós destaca aspectos positivos del preacuerdo, como el hecho de que la masía se pueda convertir en un equipamiento público, la transformación de una parte del jardín en zona verde y el traslado del 30% de la vivienda pública prevista a otra parcela del distrito de Sarrià-Sant Gervasi, la entidad considera que las medidas son «totalmente insuficientes para garantizar la conservación íntegra de este espacio histórico y natural de Sarrià», ya que no se elimina la posibilidad de construir viviendas de lujo en el jardín. La plataforma defiende que hay otras alternativas en el distrito para encajar la edificabilidad del proyecto de Corp.
En respuesta al TOT Barcelona, el Ayuntamiento de Barcelona dice que tiene conversaciones con la propiedad, los vecinos y los grupos municipales para buscar el consenso que permita resolver el futuro de Can Raventós. Y añade que aún «se está trabajando en los detalles para poder cerrar el acuerdo definitivo» que materialice una propuesta que permita preservar la masía como equipamiento, garantizar el acceso vecinal al jardín del entorno y ganar nuevas viviendas, algunas de las cuales serán protegidas, en el mismo distrito.
En su momento, la plataforma vecinal exigió un intercambio total con Corp para salvar Can Raventós. Ahora, sobre este hecho piensa que el Ayuntamiento «ha abierto la vía correcta negociando un intercambio con Corp, pero que debe ir más allá en la negociación, y lograr el intercambio total porque existe la posibilidad real de incrementar, y mucho, la edificabilidad de las parcelas donde Corp ya ha aceptado trasladar una parte de la edificabilidad», indica en el comunicado.

Comuns, PSC y Valls dieron luz verde al proyecto
El proyecto de Corp en Can Raventós se remonta en el ámbito político a septiembre de 2020, cuando el gobierno de Barcelona en Comú y PSC, junto con Barcelona pel Canvi de Manuel Valls, dieron luz verde a la edificación de 59 pisos de lujo por parte de la inmobiliaria Corp en los jardines de Can Raventós. El vecindario, agrupado a través de la plataforma Defensem Can Raventós, denunció irregularidades y presentó un contencioso administrativo en el año 2021. El TSJC les acabó dando la razón, aunque la sentencia está recurrida por Corp en el Tribunal Supremo, que aún no ha resuelto si ratifica la nulidad del plan y la licencia o por el contrario da la razón a la empresa.