El Ayuntamiento de Barcelona ha estrenado, con siete meses de retraso, el segundo tramo de la reforma de la Meridiana, que llega hasta la calle de Felipe II. El nuevo trazado, que cuenta con más verde y un espacio amplio para las bicis, se incorpora el tramo comprendido entre las Glorias y Josep Estivill, que vio la luz –de forma completa– en julio de 2022. El siguiente paso será ampliar la reforma hasta Fabra y Puig, un cambio sustancial teniendo en cuenta que la fisonomía de la avenida cambia cuando esta llega a la Sagrera, con más carriles y sobre todo con la parada de fuerza buses intermodales. Las nuevas obras empezarán el primer trimestre de 2025, durarán unos 18 meses y costarán 26 millones de euros. De esta forma, si los plazos se cumplen, el Ayuntamiento podría estrenar el nuevo tramo el 2026.
La primera teniente de alcaldía y responsable de Urbanismo, Laia Bonet, ha querido destacar la nueva Meridiana, que acaba, dice, con la «fractura que dividía los barrios» a ambos lados de la calle. «Todos habían crecido viendo la Meridiana como una autopista y ahora lo estamos convirtiendo en un eje verde y ciudadano», ha apuntado Bonet. La transformación hace mutar la Meridiana en dos carriles para vehículos y uno por bus a cada sentido de la vía, un carril bici bidireccional en la zona central, y amplía las aceras laterales. El tramo ya reformado ha permitido una reducción de 19.000 vehículos diarios, lo cual quiere decir que la reforma ya «está operando» a escala de ciudad, según la teniente: de los 60.000 vehículos diarios que circulaban antes de la pandemia se ha pasado a los 41.000 actuales.

56 millones para 3 km de reforma
El Ayuntamiento concluye un tramo que llega con bastante meses de retraso y un sobrecoste del 19,5%. En la pasada comisión de gobierno del 14 de marzo, el gobierno aprobó un aumento de unos 700.000 euros para hacer frente al desvío de una cañería de fibrocemento de agua y a las excavaciones manuales por la aparición de restos arqueológicos, entre otros.
A partir de 2026, cuando la nueva Meridiana llegue hasta Fabra y Puig, el Ayuntamiento habrá transformado tres kilómetros de Meridiana, unos 160.000 metros cuadrados de espacio, y se habrá gastado 56 millones de euros. Para Bonet, estas cifras denotan que la movilidad «se está transformando» y que el consistorio quiere «ganar en calidad y espacio público».
Ambigüedad con los planes de futuro
Toda la energía que el gobierno municipal pone en la reforma hasta Fabra y Puig –que venía del mandato anterior– desaparece para hablar de los próximos tramos. Laia Bonet no ha querido mojarse de cómo será la reforma entre la estación de metro y Cercanías actual y el puente de Sarajevo, el último tramo pactado por la administración de Ada Colau. «Qué pasará más allá de Fabra y Puig se estudiará durante este mandato», ha insistido Bonet, que ha remarcado el «compromiso» de ir más allá, pero no ha querido mojarse ni esclarecer si habrá un proyecto firme antes de las próximas elecciones. «También tenemos que poder garantizar unos principios y valores más allá de Fabra y Puig, queremos llegar a final del mandato con una propuesta sobre la mesa, pero veremos cuando la tenemos y qué tiempo tenemos para tramitar el proyecto».