La Sindicatura de Agravios de Barcelona ha hecho un llamamiento a “reflexionar” sobre el plazo de ejecución del desalojo de la Antigua Escuela Massana y sobre posibles alternativas para mantener la labor comunitaria. En un comunicado, la Sindicatura considera que la actuación del distrito de Ciutat Vella sobre la Antigua Massana está «carente de un espacio de diálogo y reflexión capaz de llegar a una solución consensuada». Por todo ello, reclama que se habilite este espacio «en beneficio del bien común y el interés público» y ha señalado que se podría hacer en el marco del Pacto por Ciutat Vella. El objetivo, apunta la institución, debe ser encontrar un espacio de diálogo que permita encontrar soluciones «adecuadas» y que no conlleven la pérdida del espacio. En el mismo comunicado, el síndico de la ciudad, David Bondia, ha ofrecido su disposición a intervenir para intentar buscar un acuerdo viable y realista, que no conlleve la pérdida de este espacio «de encuentro y cohesión» para los vecinos del barrio del Raval.
El consistorio había fijado este jueves la fecha para llevar a cabo el desalojo administrativo y envió a la Guardia Urbana y técnicos de servicios jurídicos a la plaza Gardunya. Una vez allí, constataron que los ocupantes del espacio seguían allí y había «resistencia pacífica» que impedía el lanzamiento. Ante esto, el Ayuntamiento de Barcelona solicitará una orden judicial para ejecutar el desalojo. En la notificación del Ayuntamiento, que los ocupantes recibieron a inicios de semana, se resolvía señalar el lanzamiento para este jueves día 17 «haciendo uso de todos los medios compulsorios admitidos legalmente» y se ordenaba a la Guardia Urbana que procediera al desalojo de la finca, en el número 1 de la calle de las Floristas de la Rambla, de titularidad municipal.
Batlle, partidario de recuperar el edificio
En todo esto cabe recordar que la exalcaldesa Ada Colau inició negociaciones con los colectivos que pedían que la cesión se hiciera antes de las elecciones municipales de 2023, pero esto no llegó a hacerse efectivo. Según dijo entonces Colau, esto no era posible por plazos administrativos. Pasadas las elecciones, el gobierno del PSC se ha mostrado partidario de que el Ayuntamiento recuperara el edificio. Concretamente, el concejal del distrito de Ciutat Vella y de Seguridad, Albert Batlle, ha defendido en más de una ocasión que es necesario recuperar el edificio, considerando que nada justifica la ocupación del espacio en junio de 2020 por parte de entidades y movimientos sociales del barrio.
«Ya haremos las políticas sociales si es necesario, pero las haremos acordadas y dirigidas desde la administración«, aseguró el pasado verano en una entrevista a la ACN. Según él, este espacio se había degradado y es necesario recuperarlo al igual que se hizo hace unos meses desalojando la Tancada migrant, que también forma parte del mismo complejo.