Los Mossos d’Esquadra han detenido a dos hombres que han sido acusados de traficar con drogas utilizadas habitualmente en encuentros sexuales, conocidas como ‘chemsex‘. Según ha informado la policía, distribuían la droga desde un piso turístico del Eixample de Barcelona. Las detenciones se llevaron a cabo el miércoles de esta semana, y uno de los arrestados ya acumula tres.
Desde los Mossos han informado que se intervinieron varios tipos de drogas. Concretamente, 1,5 kilogramos de ketamina, más de 500 gramos de tusi, más de 300 gramos de mefedrona, más de 1 kilo de metanfetamina, más de 200 gramos de MDMA, más de 100 gramos de pastillas de éxtasis, más de 90 gramos de cocaína y unos 18 litros de éxtasis líquido. Además, también se encontraron más de 1.300 euros en efectivo, cuatro balanzas de precisión y utensilios de manipulación y dosificación de sustancias estupefacientes.
Los agentes iniciaron la investigación de los dos individuos detenidos, de 32 y 40 años, en agosto de 2025. Este verano una persona dejó un paquete de estupefacientes dentro de la nevera en un apartamento turístico del Eixample de la capital catalana. A raíz de este hallazgo, comenzó la investigación para determinar su origen e identificar al presunto autor. Además, varios dispositivos de vigilancia permitieron confirmar la vinculación que el autor tendría con la distribución y consumo de drogas con fines sexuales.

Los dos detenidos pasaron a disposición judicial el viernes y se encuentran acusados de un delito contra la salud pública.
Otra detención por transporte de drogas
Aparte de este caso de drogas relacionadas con ‘chemsex’, la Guardia Urbana de Barcelona ha informado de otra detención relacionada con las drogas en la capital catalana.
Más concretamente, la policía local de la ciudad detuvo el viernes por la tarde a un hombre que llevaba dos kilos de cogollos de marihuana ocultos en un gran saco de comida para perro.
Agentes de paisano observaron cómo un hombre caminaba con prisa por el barrio Gótico, en el distrito de Ciutat Vella, mientras llevaba un saco de grandes dimensiones. Al detenerlo, vieron que la bolsa de comida para perro realmente contenía marihuana, y lo detuvieron por un delito contra la salud pública.
