B:SM, la empresa municipal que gestiona el Port Olímpic, ha realizado obras de mejora en el nuevo paseo sobre el dique de abrigo que garantizan la accesibilidad de las personas con movilidad reducida. La remodelación tuvo lugar después de que, a mediados de septiembre, el TOT Barcelona explicara que las instalaciones se habían inaugurado sin tener todas las zonas accesibles.

En concreto, uno de los puntos del Port Olímpic donde en septiembre no estaba garantizada la accesibilidad era la zona donde se encuentra la escultura El Capbussament, una de las ocho fuentes olímpicas, diseñadas por los arquitectos Òscar Tusquets y Carlos Díaz, que fueron esculpidas por el artista Juan Enrique Bordes Caballero. En su momento, las personas con movilidad reducida o familias con coches no podían acceder, desde el paseo, hasta este punto porque unos escalones se lo impedían, y desde la cota puerto solo se puede subir donde se encuentra el monumento a través de unas escaleras bastante empinadas.

Una rampa con barandilla
Las obras que B:SM ha ejecutado han consistido en la instalación de una rampa con barandilla en el nuevo paseo del Port Olímpic que permiten evitar los escalones. De esta manera, el nuevo paseo es totalmente accesible, desde la entrada al puerto desde la avenida del Litoral -por el puente a nivel habilitado desde el muelle de Gregal, que está conectado al resto de la ciudad por la pasarela de la avenida del Litoral- hasta donde se encuentra el mirador con la escultura. Antes de estas obras, el resto del paseo ya era totalmente accesible, con rampas a lo largo de todo el recorrido para salvar el desnivel transversal. Por su naturaleza, este paseo tiene la función de dique de protección y esto imposibilita la instalación de ascensores, entre otros elementos del mobiliario urbano. Fuentes de B:SM subrayan que con la rampa que se ha construido se garantiza la accesibilidad a todo el recinto del puerto. En futuras actuaciones, en la parte final del espigón -donde se dispone de mayor protección ante temporales- se podrían instalar nuevas escaleras, rampas o ascensores para garantizar una conectividad universal.
Por otro lado, una decisión importante de diseño del Port Olímpic ha sido que todos los locales y restaurantes tuvieran todos sus accesos a pie llano, «forzando pendientes en pavimentos y remodelando todos los sistemas de recogida de aguas para establecer ámbitos de estancia y paseo prácticamente horizontales», apuntan desde la empresa B:SM y el distrito de Sant Martí. Además, el puerto cuenta con dos ascensores panorámicos de gran capacidad que comunican los dos niveles del puerto. La conexión entre la ciudad, desde la avenida del Litoral y el barrio de la Vila Olímpica, con el muelle de Mestral está garantizada con una pendiente suave -cerca de donde se encuentra el aparcamiento de B:SM- que elimina barreras y garantiza la accesibilidad de las personas con movilidad reducida.

Pendiente mejorar la accesibilidad hasta la playa
El grupo municipal de Junts per Catalunya-Trias per Barcelona presentó el junio pasado un ruego al distrito de Sant Martí para que se instalara una rampa que garantizara la accesibilidad de las personas con movilidad reducida desde el Port Olímpic a la playa. En concreto, la portavoz de Junts en el distrito Maria Arenillas hacía referencia a un punto, “entre los muelles de Gregal y de Mestral”, donde unas escaleras sin rampa bloquean el paso a estas personas. Arenillas pedía un estudio para construir una rampa que salvara el desnivel del acceso del Port Olímpic hasta la playa, “porque también las personas con discapacidad puedan practicar y disfrutar de los deportes náuticos que desde los locales ubicados en el muelle de Mestral se organizan y realizan desde la playa».

Recuperar la mesa de diversidad funcional
En el plenario de Sant Martí del 5 de diciembre pasado, Junts planteó la recuperación de una mesa de diversidad funcional que funcionó durante 20 años en el distrito y se disolvió durante el primer mandato de los Comunes en la alcaldía, en palabras de Arenillas. A modo de ejemplo, la portavoz de Junts mostró dos fotografías del Port Olímpic -las dos que se pueden ver sobre estas líneas- y otra del puente de Santander de espacios que aún no están adaptados.
Tanto el distrito de Sant Martí como B:SM dicen que en el paso que se ve en las imágenes no se ha podido desarrollar una rampa accesible porque se debe garantizar el acceso con vehículos a las diferentes estaciones transformadoras y al corredor de acceso posterior de los restaurantes. En cualquier caso, en el ámbito del Port Olímpic y con las obras ya ejecutadas del nuevo acceso, muelle de Mestral y muelle de Gregal, existen hasta dos itinerarios accesibles entre los locales del muelle de Mestral y la playa de la Nova Icària que hacen innecesaria la disposición de otra alternativa adaptada al nuevo paso. Un recorrido discurre a través del nuevo acceso del muelle de Mestral y el otro a través del nuevo ascensor ubicado en la confluencia entre el muelle de Mestral y Gregal. El primer itinerario es a través del nuevo acceso universal que se ejecutó en el muelle de Mestral. «En este punto, los usuarios a pie disponen de una rampa adaptada con una pendiente inferior al 6%. Este recorrido conecta con el paseo del Litoral, que a su vez está conectado con la playa con una rampa del 7,5%, justo a la altura del centro meteorológico. El segundo recorrido discurre a través del nuevo ascensor ubicado en el muelle de Gregal».
«Todas estas intervenciones muestran el compromiso del Port Olímpic de crear un espacio mucho más conectado con su entorno y accesible para todos. En este sentido, cabe recordar que el único acceso para personas con movilidad reducida existente hasta hace dos años era la rampa para vehículos originaria situada en la calle de la Marina, que se proyectó en los años 80. El proceso de urbanización del Port Olímpic sigue en desarrollo, y en las próximas fases se implementarán mejoras para garantizar a las personas con movilidad reducida el acceso y la circulación por todos los espacios», concluyen desde B:SM y el distrito de Sant Martí.



