El Ayuntamiento de Barcelona y el Gremio de Constructores llegan a un acuerdo para potenciar «actuaciones de regeneración urbana en la ciudad«. El consistorio y la agrupación empresarial ponen en marcha un nuevo convenio para activar la rehabilitación de inmuebles para uso residencial y «mejorar las condiciones de habitabilidad»; así como del tejido urbano a su alrededor. Entre las diversas medidas que pondrá en marcha el entendimiento, destaca una bolsa de empresas constructoras -similar a los agentes digitalizadores del Kit Digital español- dedicadas a «facilitar a los ciudadanos» el acceso a programas públicos de ayudas para aplicar las renovaciones necesarias a las viviendas y otros inmuebles en propiedad; así como la elaboración de documentación o los proyectos técnicos necesarios, a menudo lejanos a la ciudadanía. La inversión irá vehiculada mediante la rama de los fondos europeos Next Generation dedicada a la regeneración de las ciudades.
Así, el convenio busca «establecer unas bases de colaboración con entidades representativas de la construcción» para facilitar a los particulares barceloneses el acceso a este tipo de procesos. Las empresas seleccionadas asesorarán los ciudadanos en la hora de pedir financiación pública y otras relaciones con la administración; así como en la realización de las obras mismas. La bolsa de agentes gestores se abrirá a concurso público porque se puedan presentar «las empresas asociadas que quieran», siempre que cumplan una «serie de requisitos». Más allá de la asistencia privada, el Instituto Municipal de Urbanismo (IMU) abrirá también un punto de asesoramiento dedicado a propietarios o comunidades, así como a los administradores de fincas, que ofrecerá las ayudas necesarias en la gestión de «todo aquello necesario» con el total del proceso de reforma, desde permisos y subvenciones hasta la realización de las obras. Una vez puesta en marcha el programa, las partes constituirán una comisión de seguimiento para fiscalizar «el grado de cumplimiento de los objetivos y de los compromisos adquiridos».

Programa de regeneración urbana
El nuevo acuerdo entre consistorio y Gremio se enmarca, tal como expone el ayuntamiento en su reciente comunicado, en el programa de regeneración urbana de Barcelona, una «estrategia de actuaciones que afectan tanto edificios como tejidos urbanos» degradados o insuficientes en cuanto a los «requisitos básicos de funcionalidad, seguridad y habilidad». El proceso busca aplicar sobre el estado del tejido urbano barcelonés «medidas sociales, ambientales y económicas» para adaptarlo a las necesidades de la población. Actualmente, el programa se está desplegando en hasta seis barrios: el Besòs y el Maresme y La Pau, a San Martín; Canyelles y Can Peguera, en Nueve Barrios; y Trinidad Vieja y el Congreso y los Indianos (Jardines de Massana), a San Andreu.