La Asamblea de Barrios por el Decrecimiento Turístico (ABDT) carga contra el Ayuntamiento de Barcelona por la gestión del turismo en la ciudad y tilde el plan presentado por el ejecutivo de Collboni de «propaganda»: «La medida presentada por el Ayuntamiento es el clásico mucho ruido para nada». Consideran que el plan presentado hace dos semanas es un «refreído de medidas previas» que deja «anuncios al aire sin ningún compromiso»: «El que se ha presentado es un tipo de documento promocional que se abre con 50 páginas de propaganda, más propio de la agencia de comunicación de la patronal turística que de un ayuntamiento», remachan a través de un comunicado.
En esta línea, consideran que las medidas presentadas por el Ayuntamiento no aportan ninguna solución real para hacer frente a las problemáticas derivadas del turismo, sino que «optan para hacer ver que no pasa nada»: «Un cóctel para tapar agujeros y apoyar a más iniciativas dirigidas a ampliar la oferta turística y a contribuir al crecimiento», argumentan desde la asociación de barrios barceloneses. De hecho, creen que el programa de Collboni esquiva la problemática -que ha puesto aparte de la ciudadanía en pie de guerra- y contribuye al auge de las actividades turísticas en la ciudad: «En vez de implementar medidas para impedir la llegada de más turistas, se destinan dinero público para facilitar el trabajo a la industria turística todavía más», exclaman.
«Facilitar el trabajo de la industria turística»
En esta línea, desde la asociación de barrios de la capital catalana defienden que las mejoras que el consistorio ha impulsado a la estación del Norte y en algunos espacios verdes sirven para «destinar dinero público» a «facilitar el trabajo de la industria turística»: «Todo con el objetivo de explotar hasta el último rincón urbano y conseguir que los barrios más lejanos se rellenen de actividad turística», apuntan. A banda, también consideran que la propuesta de «trasladar» plazas turísticas de los pisos turísticos a los hoteles es una medida que solo favorece al sector hotelero de la ciudad, sin tener en cuenta las necesidades de los vecinos: «Esto favorece sin duda un Gremio de Hoteles que ha tenido históricamente una estrecha relación de colaboración con el PSC y sus diferentes gobiernos municipales. Más que una solución, parece una prevaricación», lamentan.
