El mundo del deporte barcelonés y catalán perdió el pasado fin de semana una figura de las únicas e imposibles de reemplazar. Francesc Xavier Moya García, uno de los últimos grandes campeones en los deportes de combate que esta tierra ha dado. Solo la irrupción, reciente, de Sandor Martin, puede llegar a equipararse con el mítico púgil barcelonés.
Una carrera rellena de éxitos
Los deportes de contacto en Cataluña, y en Barcelona, han tenido siempre problemas para encontrar un arraigo social suficientemente fuerte para equipararse con las vivencias de otros lugares del Estado español, respeto el noble arte, pero la figura de Xavier Moya, multidisciplinaria y galardonada hizo que durante finales de siglo y principios del siguiente, estos deportes ganaran adeptos en la capital catalana.
El año 1989, Moya abrió su gimnasio en el Clot, el Esport Rogent, un año en el cual el deportista barcelonés consiguió la medalla de bronce en el campeonato de España de Taekwondo. La gloria le llegaría los dos años posteriores. En el año 1990, Moya se proclamó campeón de Europa de Kung Fu y, posteriormente, en 1991 lo fue del mundo. Además de Kung Fu, el deportista barcelonés también se proclamó hasta nueve veces campeón del mundo y siete de Europa de full-contact.
Un referente dentro del mundo del boxeo
La, prematura, retirada en 1987 de Emilio Solé hizo que el boxeo catalán quedara huérfano, sin ningún referente sólido en aquel momento, y solo viviendo de la vida pasada del mismo Solé o de Josep Gironès. Fue entonces que Xavi Moya cogió este relevo, y se subió sobre el cuadrilátero para disputar combates de boxeo. El púgil consiguió 29 victorias, cinco derrotas y dos combates nulos, además de proclamarse campeón de España del peso medio hasta tres veces.
Moya debutó en 1992, en la desaparecida Sala Barçalles, lugar donde se disputaron varias veladas de boxeo, y se retiró en 2003, después de perder el combate por el Campeonato de la Unión Europea contra Jorge Sendra.
Uno de sus combates más recordados fue el que se disputó el 11 de enero de 2002 en un Palau Blaugrana que agotó sus localidades. Xavi Moya se enfrentó a uno de los boxeadores más relevantes, quizás el mejor de toda la historia del Estado español, como era Javi Castillejo, por el Campeonato de la Unión Europea. Moya perdió el combate después de sufrir un K.O. en el quinto asalto.
Comprometido con las selecciones catalanas
El año 2009 recibió el Premi President Companys que entrega la Plataforma Pro Selecciones Catalanas, puesto que Moya fue un firme defensor de la oficialidad de las selecciones deportivas catalanas y participó en el spot televisivo que defendía su oficialidad.
