La Milla Urbana del Congrés no se celebrará este año. Así lo han decidido los organizadores, que no podían garantizar la seguridad de los participantes por culpa de las obras en la plaza del Doctor Modrego, un espacio que se utilizaba siempre para hacer la entrega de premios, pero ahora, este espacio está ocupado por toda la maquinaria necesaria, para hacer unas obras que bloquean una zona que tendría que servir para los actos populares.
Según los organizadores, el Ayuntamiento de Barcelona ha atrasado el inicio de estas obras, a pesar de que sabían que la Fiesta Mayor del Congrés, y, por lo tanto, la Milla Urbana del Congrés, se celebra a finales de septiembre y principios de octubre. La decisión de suspender la carrera se ha tenido que tomar «deprisa y corriendo» y para preservar la salud de los corredores, puesto que muchos de ellos son niños que participan de la Milla Urbana del Congrés.
El Ayuntamiento dio dos alternativas
La suspensión de la Milla Urbana del Congrés, uno de tantos actos de la Fiesta Mayor, llegó a oídos del Ayuntamiento que lamentó la posible suspensión, «sería una lástima» les dijeron a los organizadores. Entonces, desde el Ayuntamiento ofrecieron dos opciones para poder mantener la carrera, pero fueron dos opciones que desde la organización desestimaron y no fueron demasiado bien recibidas.
La primera de las opciones, por decirlo de alguna manera, que ofreció el Ayuntamiento fue un encargo a los organizadores. Qué ellos pensaran un espacio alternativo en la plaza del Doctor Modrego, una propuesta que recibieron perplejos, puesto que están en las semanas finales de la organización de la Fiesta Mayor y se tienen que hacer gestiones y acabar de concretar todo el necesario para las fiestas del barrio del Congrés.
La segunda opción, y la que ha acabado de enfurecer a los organizadores, fue el ofrecimiento de que el Ayuntamiento pusiera todos los voluntarios necesarios para garantizar la seguridad. La propuesta ha enfadado la gente de la Fiesta Mayor del Congrés, puesto que «todos los años nos decían que no podían traer más gente y los voluntarios eran siempre la mitad por nuestra parte y la otra mitad de la Guardia Urbana».
Los organizadores de la Milla Urbana del Congrés han sentenciado muy claro qué es lo que los ha ofrecido el Ayuntamiento: «¿Opciones? Pocas» y han añadido que «no se necesitan voluntarios, se necesitan manos».
