Quedan dos semanas para el partido entre Cerdanyola y Sant Andreu, pero los ánimos se empiezan a calentar. La Federación de Peñas del Sant Andreu ha alentado a los forofos cuadribarrados a no acudir al estadio del club vallesano, Las Fontetes, el 21 de enero. Este partido será la primera vez en que ambos conjuntos se vean las caras al terreno de juego cerdanyolense desde los hechos del play-off del 2021, cuando el conjunto local negó la entrada de forofos del Sant Andreu al estadio en un partido que, a la prórroga, caería del lado del Cerdanyola y acabaría subiendo a Segunda RFEF.
No quieren que el Cerdanyola obtenga rédito económico
Una de las motivaciones de los forofos del Sant Andreu, en el comunicado que han firmado todas las peñas (Desperdicis, NouNats, La Fumerola, The Ramblers, Lateral Quadribarrat y Quadritarats) es que el club vallesano no pueda obtener dinero por parte de la afición cuadribarrada, que suele desplazarse en masa lejos del Narcís Sala y vuelan «no darles ni un solo euro de beneficio a costa nuestra» según esgrime la Federación de Peñas. En el interior del comunicado han criticado la actitud que tuvo el Cerdanyola, de quien dicen que «nunca pidió disculpas por estos hechos, sino que agraviaron el conflicto vía declaraciones en las redes sociales«.
La herida de 2021 muy abierta
Apenas se acababa de salir de una pandemia y las restricciones sanitarias todavía estaban muy presentes en la sociedad catalana. En esto y en el escaso aforo de Las Fontetes se escudó el Cerdanyola, quien instauró la medida de solo vender entradas para el fútbol baso y los socios del conjunto vallesano, además de ser entradas de carácter nominal e intransferibles, hecho por el cual se impidió que ningún seguidor cuadribarrado estuviera presente.
