El Centro Municipal de Tenis del Vall d’Hebron acogió los partidos de tenis de los Juegos Olímpicos del 92. En sus pistas jugaron algunos de los mejores jugadores y jugadoras de la época, como Steffi Graf, Jennifer Capriati, Boris Becker, Marc Rosset o la barcelonesa Arantxa Sánchez Vicario. Aunque se están haciendo inversiones, el club presenta un deterioro importante, lo que motivó que el pasado enero unos 300 socios recogieran firmas contra el estado «deplorable» de las instalaciones.

En declaraciones al TOT Barcelona, el concejal Jordi Castellana (ERC) es muy crítico con la situación: «Es la única instalación olímpica de Barcelona que no ha tenido una reforma integral desde los Juegos del 92 y su estado actual es una muestra más de la desinversión en los equipamientos deportivos de la ciudad. En Barcelona hubo un gran boom de crecimiento de instalaciones deportivas por las necesidades olímpicas, pero poco a poco han ido quedando viejas y en algunos casos obsoletas».

Invertidos más de medio millón de euros en mejoras
Según el escrito de enero de los socios críticos con la gestión del club, cuatro pistas de pádel presentaban entonces «un deterioro considerable», con rejillas rotas, y otras dos tenían zonas donde la moqueta estaba muy desgastada. También había con agujeros que, además de ocasionar botes imprevisibles, podían provocar lesiones. Además, las pistas de tenis de tierra batida, estaban en muy mal estado. «En concreto, en la pista 12, las líneas están tan desgastadas que sobresalen del suelo y representan un riesgo inaceptable», decían. Otros desperfectos eran máquinas de fitness averiadas, aparatos de gimnasio sin mantenimiento, duchas fuera de servicio y gradas sin asientos. Los usuarios también se quejaban de que la dirección había cambiado aspectos de la normativa para reservar las pistas y solo se podía hacer con dos días de antelación y para jugar solo una hora. Ellos pedían que la reserva se pudiera hacer cinco días antes y jugar durante 90 minutos.

Esta semana, este medio ha hablado con uno de los abonados del centro, Pere Panyella. Explica que en estos dos meses, después de que el caso saliera en los medios de comunicación, han podido hablar con el director Xavier Amador. «Hasta que no salió en las noticias no se hacía nada». El socio reconoce que se han hecho algunas reformas. Por ejemplo, se ha arreglado una de las pistas de tenis, se revisará que las luces de varias pistas no enfoquen a los jugadores y se repararán dos pistas de pádel.

Pero, según Panyella, es necesaria una reforma integral del club, «a fondo». Y recuerda que el caso del centro del Vall d’Hebron no es un caso único de dejadez de instalaciones municipales, ya que el campo de fútbol de la Teixonera se encuentra en muy mal estado, y a mediados de noviembre de 2024, durante la celebración del derbi entre el Europa y el Sant Andreu, la valla del campo Nou Sardenya donde se agrupaba la afición del Sant Andreu cedió. En opinión de Panyella, el Ayuntamiento hace concesiones a empresas o entidades que invierten lo mínimo para obtener el máximo rendimiento.

En respuesta al TOT, el Institut Barcelona Esports (IBE) del Ayuntamiento de Barcelona asegura que la UTE formada por la Unió de Federacions Esportives de Catalunya (UFEC) y la Federació Catalana de Tenis, que gestionan el club, se comprometió a hacer una inversión de 400.000 euros. Y desde 2019, cuando se inició la concesión, el importe en obras de mejora ha sido de 545.000 euros. Este año se ejecutan otras actuaciones «como la reparación de las pistas de tenis y de pádel, la reforma del gimnasio, el pintado y la renovación de la señalización de toda la instalación y mejoras en la climatización, entre otras», apuntan fuentes municipales. El pliego de cláusulas de la concesión también prevé la posibilidad de que el Ayuntamiento pueda implementar mejoras estructurales de la instalación en caso de que sean necesarias. Ni la Federació Catalana de Tenis ni la UFEC han respondido a los requerimientos informativos de este medio.

Según ha podido saber este medio de fuentes que conocen bien estas instalaciones, para mejorar el Centro Municipal de Tenis del Vall d’Hebron se necesita una inversión muy importante, ya que es necesario hacer una reforma integral, que podría costar alrededor de unos dos millones de euros. Por otro lado, el club presenta un problema de origen, de cuando se construyó el recinto y la ronda de Dalt, ya que por debajo pasa un arroyo y hay un cierto movimiento de tierras. En cualquier caso, hay escaleras rotas, muros sin mantenimiento, pistas de pádel con la moqueta en mal estado…, entre otros desperfectos, que deben repararse. El caso del club de tenis es como el de una persona que tiene un piso alquilado y determinadas inversiones del inmueble las debe hacer el propietario y no el inquilino, apuntan estas fuentes en referencia a la necesidad de que el Ayuntamiento destine más recursos para mejorar las instalaciones.

El IBE asegura que está haciendo un seguimiento de todos los espacios a mejorar en el Centro Municipal de Tenis del Vall Hebron, junto con el gestor. «En esta línea se llevan a cabo periódicamente actuaciones de renovación y mantenimiento y están previstas más actuaciones en los próximos meses». Según las fuentes municipales consultadas, «el Tenis Vall Hebron es una instalación muy extensa en metros cuadrados y mucho espacio al aire libre, y por tanto muy expuesta a las inclemencias del tiempo, un hecho que acentúa su deterioro».

11,6 millones para renovar instalaciones deportivas, dice ERC
El concejal de ERC Jordi Castellana recuerda que su partido lleva mucho tiempo reclamando una apuesta real para dignificar las instalaciones municipales de la ciudad. «No podemos permitir que infraestructuras públicas, con un gran potencial deportivo y social, se degraden por la inacción del gobierno municipal». A iniciativa de los republicanos, el Ayuntamiento aprobó el año pasado un plan de choque de mantenimiento de instalaciones deportivas con una inversión mínima de 10 millones de euros en 2025. «Esta medida es imprescindible para revertir años de dejadez y para adaptar los equipamientos a las necesidades actuales. Así, en el presupuesto de 2025 hemos planteado destinar 11,6 millones a renovar y mejorar diferentes instalaciones deportivas de la ciudad que necesitan reformas integrales en iluminación, vestuarios, pavimentos, césped, eficiencia energética… Y este equipamiento -el Centro Municipal de Tenis del Vall d’Hebron- debería estar en la lista de inversiones de este año».

El gobierno municipal no ha respondido si el Centro Municipal de Tenis del Vall d’Hebron es la única instalación olímpica pendiente de reformarse integralmente, pero asegura que todos los equipamientos deportivos de los Juegos Olímpicos de 1992, incluido el Tenis Vall d’Hebron, «se han ido adaptando para poder seguir funcionando y prestando servicio no solo a los clubes y entidades de la ciudad sino también a la ciudadanía en general, reconvirtiendo espacios pensados para competiciones de máximo nivel en equipamientos deportivos que pudieran atender las diversas modalidades de práctica deportiva federada, de ocio y salud. En este sentido, en estos 30 años los gestores de los equipamientos y el Ayuntamiento han ido realizando actuaciones de remodelación y mejora del espacio, adecuaciones a las nuevas normativas y a las nuevas demandas del mundo del deporte».





