El Ayuntamiento de Barcelona ha repuesto la valla del estadio Nou Sardenya que cedió en el derbi contra el Sant Andreu. El CE Europa había marcado como plazo el pasado viernes, antes del partido de liga contra el CE Olot, pero sobre todo pensando en el enfrentamiento de Copa del Rey contra Las Palmas del miércoles. La previsión del club es vender prácticamente todas las entradas ante la visita de un primera división, por lo que urgía arreglar los problemas del Gol Norte con celeridad.
Desde el club detallan que el Ayuntamiento, que ha asumido el coste, de unos 20.000 euros, ha sido rápido y que el mismo viernes, por la tarde, cuando entrenaban el filial y el primer equipo masculino, los técnicos municipales ya estaban ultimando los últimos detalles. El club está hablando ahora con los patrocinadores para cerrar los últimos flecos; básicamente, para decidir si la valla se pinta entera de color azul o si se acuerda una manera de hacer visible la publicidad.
Desde que cedió la valla, el club solo ha tenido que disputar un partido, del primer equipo femenino, sin la mencionada valla. Fuentes de la entidad de Gràcia detallan a este diario que los organismos responsables de la liga no les obligaron a proteger la zona de cara al enfrentamiento del femenino que se disputó el fin de semana siguiente al incidente. El Europa y el Ayuntamiento se acusaron mutuamente, en un inicio, de los problemas de la valla, pero anunciaron, tras la polémica, que se reunirían próximamente para abordar mejoras en el Nou Sardenya.
El final del derbi, a puerta cerrada
El derbi Europa – Sant Andreu se suspendió en el minuto 49, con 3-5 favorable al equipo cuadribarrado, después de que la valla del Gol Norte cediera durante la celebración del quinto gol del Sant Andreu. El partido, finalmente, se reanudará a puerta cerrada a pesar de la oposición de ambos clubes. La Federación Española entiende, tras analizar lo que puso el árbitro en el acta, que la valla cede porque los jugadores andreuenses se acercaron «en exceso». El organismo culpa a los jugadores del Sant Andreu y su afición del cese, y al Europa, «a quien incumbe el deber de preservación de la seguridad de las instalaciones», por no haberla mantenido en buen estado.
Los clubes recurrieron contra la sentencia. El Sant Andreu, argumentando que la valla cede por el centro de la gradería, mientras que los jugadores celebran el gol con la afición más próxima al córner derecho, que no se hundió. En declaraciones a este diario, el portavoz del Sant Andreu, Gerard Álvarez, lamentaba que la sentencia «quiera criminalizar a nuestra afición» cuando «todo el mundo sabe que la valla cede por mal mantenimiento y no porque el Sant Andreu la rompa». La federación ha ignorado las alegaciones y el derbi terminará a puerta cerrada.
