El gobierno de Jaume Collboni mantendrá abierta la piscina del Centro Deportivo Municipal (CEM) Sant Andreu de Palomar hasta que se haya construido el nuevo CEM Casernes, cuya aprobación del plan está prevista para el primer trimestre de 2026 y comenzar el plan funcional (donde se concretan los servicios a ofrecer o actividades a acoger y se especifican espacios y dimensiones) antes de que termine el mandato, destacan fuentes municipales. De esta manera, el distrito de Sant Andreu rectifica las intenciones iniciales de clausurar este equipamiento una vez se hubiera instalado la cubierta del nuevo CEM Sant Andreu-la Sagrera, ya en construcción, tal como denunció el pasado julio el grupo municipal de Junts per Barcelona y recogió el TOT Barcelona, a partir de lo que se decía en la documentación para la gestión del CEM Sant Andreu-la Sagrera. La piscina del CEM Sant Andreu es gestionada por el Club Natació Sant Andreu. El CEM Casernes no tiene fecha, ahora mismo, de inicio de construcción y final de obras.
Tal como explicó el jueves 16 de octubre uno de los consejeros del PSC en el distrito de Sant Andreu, David Paredes, la piscina del CEM Sant Andreu, situada en la calle de Santa Coloma, se «mantendrá operativa» hasta la construcción del futuro CEM Casernes, que incorporará una nueva lámina de agua, diseñada para responder a las demandas deportivas del distrito. «Este nuevo equipamiento permitirá renovar la oferta acuática del distrito con una piscina moderna, accesible y adaptada a las necesidades de clubes y escuelas, garantizando la continuidad deportiva con condiciones óptimas y equidad territorial», dijo Paredes en el plenario a pregunta del consejero de ERC en el distrito de Sant Andreu Carlos R. Escuredo.
Se desvinculará la concesión, pero no cerrará
Según el consejero socialista, una vez se haya puesto la cubierta del nuevo CEM Sant Andreu-la Sagrera, la piscina del CEM Sant Andreu de la calle de Santa Coloma se desvinculará de la nueva concesión, «lo que no significa que se cierre». «Esta planificación garantiza una transición ordenada y la continuidad de los servicios deportivos».

Tal como denunció Junts, el hecho de que se cerrara la piscina del CEM Sant Andreu suponía dejar de tener unas instalaciones acuáticas que disponen de las dimensiones reglamentarias para la práctica de la natación y el waterpolo de competición. En cambio, la piscina del CEM Sant Andreu-la Sagrera no cumplirá estas condiciones ni en profundidad, ni en longitud ni en configuración espacial. Este hecho podía dejar en precario a deportistas de élite del Club Natació Sant Andreu, que alternan los entrenamientos entre la piscina del club y la del CEM Sant Andreu.
La polémica en torno al cierre de la piscina del CEM Sant Andreu no ha sido el único contratiempo con el que se ha encontrado el gobierno de Collboni. El Tribunal Catalán de Contratos del Sector Público (TCCSP) invalidó la licitación del nuevo Centro Deportivo Sant Andreu-la Sagrera (CEM) después de que fuera impugnada por la Asociación de Clubs de Natación de Catalunya (ACNC). La licitación incluía que el ganador del concurso se debía hacer cargo de la construcción de la cubierta y acomodar los vestuarios. El costo aproximado era entre tres y cuatro millones de euros y el Club Natació Sant Andreu renunció a la licitación para “no poner en riesgo” la viabilidad económica del club histórico.
El estudio de viabilidad económica, no válido
El dictamen del tribunal concluyó que se declaraba «no válido el estudio de viabilidad económica que sustenta toda la concesión» del CEM Sant Andreu-la Sagrera. Por otro lado, subrayaba la obligación legal de facilitar la información sobre el personal a subrogar, una «información clave para calcular los costos laborales y presentar ofertas viables».
En el plenario del jueves pasado, el consejero de PSC reconoció que el gobierno ha asumido la resolución del Tribunal Catalán de Contratos del Sector Público y ha reiniciado la revisión del plan de viabilidad económica como paso previo para retomar el proceso de licitación con todas las garantías.