El barrio de Sant Andreu de Palomar de Barcelona fue el pasado viernes el escenario de una peligrosa persecución que acabó con un menor de edad detenido. Los hechos tuvieron lugar al atardecer, cuando el implicado se negó a pararse después de que un grupo de agentes de los Mossos d’Esquadra se lo pidieran al comprobar que estaba circulando en un patinete sin respetar las directrices que marca la normativa.
La negativa del menor llevó los agentes a empezar una persecución a toda velocidad por las aceras de varias calles de Sant Andreu, con el riesgo que esto supone peatonal. Algunos de los momentos de esta peligrosa persecución fueron captados por varios vecinos y compartidos después por la plataforma
Según informa
Otra persecución a Horta-Guinardó
Se da la circunstancia que este fin de semana también tuvo lugar otra persecución policial, esta vez, sin embargo, al distrito de Horta Guinardó de la capital catalana. Los hechos se produjeron alrededor de las siete y media de la tarde, cuando unos agentes de la Guardia Urbana vieron el conductor de una motocicleta saltarse un semáforo con rojo. Los agentes le pidieron que se parara. No lo hizo y se inició una persecución. El motorista, que además llevaba otro pasajero, conducía de manera temeraria, “saltándose todos los semáforos y conduciendo a toda velocidad”.
La persecución no acabó hasta que la motocicleta se chocó contra un vehículo que estaba parado. En aquel momento, los policías consiguieron retener al conductor y, por su parte, el otro pasajero, huyó. La parte más importante, pero, es que los agentes se enteraron que la moto que conducía había sido robada el pasado 1 de febrero. Detuvieron el conductor por robo de un vehículo y, además, “lo denunciaron por conducción temeraria y por conducir sin carné”.
