Un porcentaje elevado de los barceloneses resultó víctima al menos de un delito durante el año 2022. Esta es una de las conclusiones que se pueden extraer de la última Encuesta de Victimización al Área Metropolitana de Barcelona (EVAMB), que el Instituto Metrópoli hace en coordinación con el Ayuntamiento de Barcelona.
En concreto, el 26,7% de los vecinos de la capital catalana manifiestan haberse sentido víctima de al menos un delito durante el año pasado, de forma que más de un cuarto de los barceloneses se habrían visto afectados por un incidente de estas características, que puede ir desde un robo hasta una agresión o amenaza. Estos datos sitúan a la ciudad como el territorio que tiene el índice de victimización más elevado de toda el área metropolitana.
Por otro lado, en la zona del Besòs, el 22,3% de la población se ha sentido víctima de al menos un delito. En este ámbito territorial, la victimización es más alta entre los residentes de Santa Coloma de Gramenet (23,6%), seguida de Badalona (21,9%). En cuanto a la zona del Llobregat, el índice ha llegado al 22,2%. El de Hospitalet de Llobregat se ha situado en el 26,6%, y el de Cornellà en el 17,6%.
Registros superiores a la última edición, pero parecidos a las cifras precovid
Si miramos las cifras totales del territorio metropolitano, el 23,2% de la ciudadanía del área metropolitana de Barcelona manifiesta haber sufrido, como mínimo, un hecho delictivo durante el 2022. Estos datos suponen un aumento de 1,7 puntos respecto de la edición anterior de la encuesta, cuando el índice fue del 21,6%, y se sitúan en valores parecidos a los registrados en los dos años anteriores al estallido de la pandemia del coronavirus, cuando las cifras fueron del 24% y el 27%. Entre los delitos más habituales se encuentran los robos de bolsas o carteras (10,7%), acciones contra vehículos (7,8%) o agresiones con componentes de odio y discriminación. Estas han afectado al 4,5% de las mujeres y al 3,7% de los hombres.

