En un momento en el que los robos con violencia y los hurtos bajan en Barcelona, según el balance de criminalidad del Ministerio del Interior del primer trimestre del año, la última moda de los ladrones es llevarse grifos de las fuentes públicas de Barcelona.
Fuentes municipales explican al TOT Barcelona que en abril, la Guardia Urbana detuvo a un hombre que había robado varios grifos de fuentes de Montjuïc. El Ayuntamiento niega que sea un problema general en la ciudad y lo reduce a este episodio. «Fue una cosa localizada y acotada en el tiempo y la zona», afirman las fuentes consultadas.
No se ha visto afectada ninguna fuente patrimonial
Según el consistorio, todos los grifos que se robaron en Montjuic eran de beber y, por ahora, no se ha visto afectada ninguna fuente patrimonial. En la capital catalana hay cerca de 1.700 fuentes para beber y 301 fuentes ornamentales.
Casos en otros municipios
Los robos de grifos de fuentes no es un fenómeno nuevo. En verano de 2021, Sant Vicenç dels Horts se quedó sin fuentes públicas porque robaron todos los grifos. En plena ola de calor, el Ayuntamiento del municipio barcelonés cifró el coste de las reparaciones en 3.000 euros y lamentó el perjuicio que esto causaba en la población.
En abril del 2023, la policía municipal de Calafell detuvo a un hombre de 49 años por haber robado una docena de grifos de fuentes públicas. Los agentes le acusaron de un delito de hurtos y de otro de daños en el mobiliario urbano.
Ya con anterioridad, en otoño de 2017, en
