Dos policías fuera de servicio han salvado a una mujer de 51 años en el Metro de Barcelona. Según informa la Policía Nacional en un comunicado, la mujer sufrió un infarto dentro de un tren del L1, en la estación de Santa Eulàlia. Los agentes se dirigían a casa después de acabar su jornada laboral y oyeron «gritos de auxilio» dentro de un vagón. En aquel momento, explica el comunicado, los policías «se dirigieron a la carrera hasta el lugar», esquivando la multitud y asistiendo a la mujer, que estaba en el suelo sin respirar y sin polvo.
En el lugar de los hechos había también un enfermero y un estudiante de enfermería que supervisaron los hechos y, según decía el balance policial, supervisaron las acciones que llevaron a cabo los dos agentes. Los dos agentes se estuvieron 20 minutos practicando maniobras de reanimación e hicieron un uso de un desfibrilador que les acercó el personal de seguridad de la estación.
La mujer se recupera en su casa
La mujer empezó a recuperar el pulso «muy levemente» en el momento que llegaron los servicios de emergencia, que la trasladaron a un hospital. El SEM confirmó que la mujer sufría un infarto. La misma policía detalla que la mujer se está recuperando en casa después de pasar tres semanas en el hospital.
La policía celebra la rápida de actuación de sus agentes y recuerda que los primeros minutos son «claves» en estos casos. En este sentido, el comunicado policial insiste que durante estas maniobras tuvieron que realizar «diferentes relevos» fruto «del esfuerzo que supone y el agotamiento que implica». El código ético de los cuerpos de seguridad les obliga a actuar en casos de emergencia para evitar, a pesar de que estén fuera de su horario laboral, «un mal inminente o grave que ponga en peligro la vida de un ciudadano».
