Agentes de la policía nacional española ha desarticulado un grupo criminal que estafó un millón de euros con la compraventa de vehículos de alta gama. Lo hacían sin violencia y sin levantar sospechas durante las operaciones. A partir, eso sí, de algunas denuncias que alertaban de la desaparición de algunos coches, los agentes descubrieron que los estafadores se hacían pasar por empresas solventes capaces de llevar a cabo una buena negociación para el supuesto cliente, a quien seducían gracias también a una falsa oficina desde donde exponían algunos vehículos de lujo. Según se apunta en un comunicado, los estafadores empezaron su actividad delictiva en Valencia, pero con los años se trasladaron a Barcelona.
El grupo se daba a conocer por internet, sobre todo en portales de compraventa de vehículos de segunda mano, desde donde se presentaban como trabajadores de esta supuesta empresa de experiencia contrastada. Se ofrecían a ser intermediarios y, en algunos casos, llegaron a entregar una paga y señal por no levantar sospechas, ganándose la confianza de sus ‘clientes’. Las víctimas desconocen que detrás de estas personas no había ninguna compañía seria, sino la intención de unos estafadores de sacar rédito económico de la operación sin que ellos se enteraran.
Las víctimas libraban los coches para que la supuesta empresa culminara la venta por la cantidad acordada, pero esta nunca les devolvía el dinero de la venta. En el mejor de los casos, los estafadores los vendían por precios más bajos al acordado, atrayendo así clientes de forma rápida. En otras ocasiones, la oferta nunca se llegaba a publicar. Sea como fuere, el dinero nunca devolvían al propietario del vehículo.
31.000 euros y 11 coches
El cuerpo policial encargado de la investigación registró seis domicilios y locales, a través de los cuales se intervino más de 31.000 euros en efectivo, once vehículos, sobre dos de los cuales constaba una denuncia de robo, diez móviles y documentación financiera y mercantil. Los estafadores tenían a su cargo diferentes sociedades mercantiles que habían sido constituidas solo para poder llevar a cabo las estafas con más facilidad.