La Guardia Urbana y los Mossos d’Esquadra han intervenido, en una operación conjunta, un narcopiso en el barrio del Raval. Este inmueble se había convertido en un nuevo punto de distribución de droga en Ciutat Vella y se utilizaba, también, como lugar habitual de consumo. La operación policial ha acabado con cuatro detenidos, tres de los cuales como presuntos responsables del punto de venta de sustancias estupefacientes. El otro detenido tenía una orden judicial pendiente.
La policía también ha identificado a nueve consumidores que eran dentro de la vivienda y ha intervenido tanto el material –enseres de manipulación– y dinero en efectivo, así como varios tipos de droga. Entre las sustancias encontradas en el narcopiso se han encontrado crack y hachís. Los cuerpos policiales han desalojado la vivienda y se la han devuelto al propietario.
La intervención conjunta de la Urbana y los Mossos se suma a una nueva inspección de la policía local, este pasado miércoles. Los Equipos de Policía de barrio de Ciutat Vella inspeccionaron dos establecimientos donde se vendían productos de alimentación con derivados del cannabis o el CBD. Los agentes interceptaron 1.188 artículos que enviaron a la Agencia de Salud Pública de Barcelona para que sean analizados.
La mitad de los narcopisos, en Ciutat Vella
La mayoría de narcopisos de Barcelona están en Ciutat Vella, tal como explicó el año pasado los Mossos d’Esquadra después de analizar los primeros resultados de la oficina antidroga del cuerpo. Esta nueva unidad se creó para hacer frente a los narcopisos y otros puntos de venta de droga. En los seis primeros meses de vida de esta nueva oficina, los Mossos intervinieron y desmantelaron 34 puntos de consumo y venta de sustancias estupefacientes, una media de 7 actuaciones policiales por mes. El 50% de estas actuaciones contra la droga, en la ciudad de Barcelona, se han producido al distrito de Ciutat Vella, mientras que el resto han acontecido en varias zonas de la ciudad.
