La broma le ha salido carísima al conductor de una motocicleta que circulaba por la avenida Diagonal de Barcelona a 95 km/h, en una vía donde la velocidad máxima permitida es de 50 km/h. Pero es que además de la infracción por velocidad, el motorista cometió otra infracción muy grave. La Guardia Urbana detectó este vehículo la madrugada del 17 de noviembre, y además del exceso de velocidad, sorprendieron al conductor, quien para evitar ser identificado por el radar fijo, tapaba parcialmente con la mano la matrícula del vehículo. Todo esto ha supuesto una sanción de 6.400 euros y la pérdida de 10 puntos del carnet de conducir del infractor.
🏍️💨📸 La #gubOCIG ha detectado una moto circulando a 95 km/h en un tramo de la Av. Diagonal limitado a 50 km/h.
— Guàrdia Urbana Barcelona (@GUBBarcelona) November 27, 2024
🧐 El conductor tapó parcialmente la matrícula con la mano para evitar ser captado, pero ha sido identificado y sancionado con una multa de 6.400 € y la pérdida de 10 puntos. pic.twitter.com/4wYUKFlihV
No es el primer fitipaldi
El caso de este conductor que casi dobla la velocidad máxima permitida no es ni mucho menos el único. La Guardia Urbana ha sorprendido a varios fitipaldis. El último, uno que circulaba a 183 km/h por la ronda de Dalt, en un tramo donde la velocidad máxima es de 80 km/h. Pero el récord más brutal fue en marzo de 2022, incluso, un conductor puso el coche con el que circulaba por la ronda de Dalt a 203 km/h. El incidente tuvo lugar a eso de las tres de la madrugada.
Cabe recordar que los delitos por exceso de velocidad pueden conllevar penas de prisión de tres a seis meses, o multa o trabajos comunitarios, así como la pérdida del carnet de conducir de uno a cuatro años.

