Un accidente este lunes en la C-58 ha provocado la muerte de un motorista. Según informan diferentes medios, el motorista cayó en el kilómetro 1,2 -a la altura de Torre Baró- y habría sido atropellado por un camión. Los agentes han cortado dos carriles y ha habido colas de tres kilómetros entre Barcelona y Montcada i Reixac. La C-33 también se ha visto afectada. En un comunicado, el sindicato SAP-Fepol ha confirmado que la víctima es Carlos J.F., cabo del Área Regional de Recursos Operativos (Arro) de los Mossos d’Esquadra. «Desde aquí, abrazamos con toda la calidez posible a la familia, amigos y compañeros. Descansa en paz», han expresado.
Los Mossos d’Esquadra, que recibieron el aviso a las diez y media de la mañana, todavía están investigando los hechos. Hasta el lugar del accidente se han desplazado ocho unidades de la policía catalana y dos del Sistema de Emergencias Médicas (SEM). En un mensaje en la red social X, el sindicato ha lamentado «profundamente» la muerte de su compañero, que estaba destinado a la Región Policial Metropolitana Norte. Este año ya han muerto 30 personas en accidentes de tráfico en Cataluña, tres de ellas este mismo fin de semana. En total han muerto 9 motoristas.
❌❌ Dos carriles cortados en la C-58 en Torre Baró en sentido Barcelona por #accidente
— Trànsit (@transit) March 3, 2025
🔴 #Retenciones desde Montcada i Reixac, sentido sur
🔴 También paradas en la C-33 desde Montcada pic.twitter.com/Qr4tZTYF0e
Preocupación por los motoristas
El accidente no se contabilizará en los registros municipales, que este año, por ahora, solo cuentan con la muerte de un ciclista accidentado a inicios de año en Sarrià. En 2024 se registraron 11 víctimas mortales, la mitad que el año anterior y 12 menos que en 2012. Datos que han ido aumentando después de los años marcados por la reducción de la movilidad de la pandemia.
En la última década, las peores cifras datan entre los años 2015 y 2017. En esa ocasión, las cifras rozaban la treintena de víctimas mortales causadas por un accidente de tráfico. Aunque las cifras son ligeramente mejores, los motoristas continúan siendo el colectivo que más preocupa. El año pasado murieron cinco en Barcelona, un año antes fueron 8 y en 2022 se registraron 16.
