La Policía Nacional, los Mossos d’Esquadra y la Guardia Urbana de Barcelona se han unido en un nuevo macrooperativo contra un grupo de grafiteros por vandalizar convoyes de tren y metro. En total han detenido 21 personas, a las cuales se les atribuyen más de 200 delitos y daños materiales valorados en más de un millón de euros. Las autoridades los acusan de haber vandalizado con pintadas a vehículos e infraestructuras de tren y metro de RENFE, Metro Barcelona, TMB, Metro BILBAO y Ferrocarriles de la Generalitat Valenciana. La mayor parte de las detenciones se han producido en la capital catalana, 14 en concreto, pero no exclusivamente. La policía ha detenido dos personas en Vilanova y la Geltrú, tres a Tarragona y dos más a Madrid.
El macrooperativo policial se puso en marcha a mediados del año pasado y desde entonces han hecho un seguimiento de los actos vandálicos de los acusados. En la primera fase del proceso, las autoridades se dedicaron a hacer un seguimiento de los presuntos autores de los grafitis para poderlos identificar. Una vez conocían las identidades de los autores, la policía los ha localizado y ha actuado de manera coordinada para detenerlos. Entre los detenidos hay algunos de los presuntos autores de los actos vandálicos del 21 de enero en la L4 y L2 del Metro de Barcelona y también de los desperfectos al alcantarillado del passeig de Sant Joan. El ‘modus operandi’ de los grafiteros siempre era el mismo: pintar los convoyes, identificar las piezas con sus firmas, y grabar todo el proceso en video para difundirlo posteriormente en las redes sociales para ganar notoriedad como grafiteros.

La mayor parte de los detenidos reside en Cataluña
A pesar de que los hechos de los cuales se los acusa se han producido en diferentes puntos del Estado español, la investigación policial ha determinado que la mayor parte de los detenidos residen en Cataluña y se desplazaban por el territorio para hacer sus grafitis. De hecho, según la policía, los actos vandálicos también se extendieron por otros puntos de Europa, como por ejemplo Copenhague (Dinamarca), Malmö (Suecia) y Oslo (Noruega). Es por eso que en la investigación también han participado agentes de la Interpol.