Fin del misterio. Giles Pooley, el empresario británico de 47 años establecido en Barcelona y desaparecido desde el 8 de marzo de 2023, ha sido encontrado muerto. Así lo ha explicado en el diario El Punt-AVUI en un artículo firmado por la periodista especializada en sucesos Tura Soler. Los Mossos d’Esquadra han identificado a través del ADN la identidad del cadáver que se encontró a finales de 2024 en Montjuïc. Aunque los Mossos aún tienen pendiente ratificar las pruebas con más muestras de ADN que han solicitado a familiares de Pooley, los amigos han desactivado la búsqueda, así como la asociación Sosdesaparecidos, que tenía colgada la alerta por su caso y que ahora ha publicado la anotación de que había sido encontrado sin vida.
La pista se pierde en el Poblenou
Tura Soler explica que la pista del empresario se pierde la tarde del 8 de marzo de hace casi dos años en el barrio del Poblenou, donde residía. Fue su compañero de piso quien se alarmó porque no lo encontraba en casa y, en cambio, sí estaba su perro, un husky que siempre lo acompañaba. Su pista se pierde totalmente, ni llamadas de teléfono ni rastro del empresario, que también tenía una residencia en Sitges. Y hasta hoy, que las muestras biológicas del empresario han servido a los Mossos para identificar el cadáver de Montjuïc.
Hay otros casos aún por resolver de desaparecidos en Barcelona. Uno de los casos más mediáticos fue el del jugador de rugby británico Levi Simeon David, desaparecido en Barcelona el 29 de octubre de 2022. La última vez que se le vio fue en el Old Irish Pub, situado en el número 31 de la Rambla. A estas horas sigue como desaparecido, y las últimas informaciones, de hace más de un año, apuntaban que el deportista podría haber sido víctima de una red de chantajistas del mundo de la televisión. De hecho, los investigadores habían encontrado su pasaporte en el Puerto de Barcelona, y además, la última señal de su móvil es la estación de Sants, si bien las cámaras de la estación nunca lo localizaron.