La asesina en serie Remdios Sánchez volverá a sentarse en el banquillo de los acusados. Todo apunta a que la gallega, que fue condenada a casi dos décadas de prisión en 2008 por haber matado a tres abuelas en Barcelona, es quien está detrás de la muerte de una mujer de 91 años que vivía en la avenida de Monelos, en la localidad gallega de Coruña. Según los detalles expuestos en La Voz de Galicia, la asesina habría actuado durante el permiso penitenciario que disfrutaba por haber cumplido los tres primeros años de condena con buena conducta. La Policía Nacional ha anunciado su detención en la prisión de Teixeiro.
El rotativo gallego detalla que la víctima llevaba años viviendo sola y que la policía la encontró muerta en el baño de su propio domicilio. En primera instancia, los médicos no encontraron signos de violencia y tramitaron el fallecimiento como una muerte natural. Pero diferentes grabaciones permitieron ver a una persona desconocida entrando en el domicilio de la víctima, lo que llevó al magistrado encargado del caso a detener el entierro para practicarle una autopsia judicial. Los forenses han acabado determinando que la abuela presentaba síntomas de asfixia y fracturas costales. La policía científica también ha encontrado huellas dactilares en el domicilio que coinciden con las de Remedios Sánchez.
144 años de prisión por tres asesinatos en Barcelona
Remedios Sánchez, de 51 años, cumple una pena de prisión de 144 años por el asesinato de tres mujeres mayores y tentativa de homicidio de otras cuatro. Los hechos ocurrieron entre el 10 de junio y el 3 de julio de 2006 en Barcelona. El magistrado entendió entonces que la acusada había perpetrado actos «especialmente violentos» hacia unas mujeres sin capacidad de defenderse. La sentencia también condenó a Sánchez a indemnizar a los familiares de las víctimas.
El caso la hizo conocida popularmente como la ‘mataiaies’ y ha tenido continuidad judicial en los últimos años. El Tribunal Supremo desestimó el pasado junio el recurso de casación interpuesto por Remedios Sánchez. En el recurso, la condenada sostenía que no se valoraron correctamente las pruebas que demostraran que ella era la autora de todos los crímenes.