Ayer la Unidad de Investigación y Prevención de la Accidentalidad (UIPA) del cuerpo policial de la Guardia Urbana de Barcelona consiguió localizar y denunciar una conductora que había tenido un accidente el pasado 8 de abril, en el cual chocó con el mobiliario urbano, causando desperfectos, y después se dio a la fuga. Agentes de la policía barcelonesa han podido seguirle la pista gracias a los restos que se quedaron al lugar de los hechos, a la B-20, las cuales han impulsado una investigación policial.
Como se puede ver en las siguientes imágenes que ha publicado la Guardia Urbana a través de su cuenta de Twitter, la conductora colisionó con la valla que limita la calzada con el muro de separación del carril por el cual circulaba con otros carriles de circulación y provocó que esta quedara totalmente destrozada. También se llevó una de las rejas metálicas de color que marcan claramente la separación de vías, y aplastó una pilona de plástico.
Ahora bien, fue el turismo de la conductora quien se llevó la peor parte del accidente, puesto que como se puede ver en la imagen del tuit, la parte delantera quedó completamente destrozada. De hecho, fruto de los destrozos que sufrió el vehículo, la policía barcelonesa pudo encontrar un retrovisor, un trozo de la matrícula del vehículo y el logotipo de la marca del coche, un Nissan. Gracias a estos hallazgos pudieron empezar a investigar los hechos.
Un Ferrari en llamas
La ronda del Litoral de Barcelona fue el escenario este pasado lunes de una escena muy poco habitual. Muchos de los conductores que circulaban por esta vía de la capital catalana se encontraron con un vehículo incendiado en medio del asfalto, ocupando uno de los carriles a la altura de la salida de Bac de Rueda en sentido Llobregat. Se trataba nada más y nada menos que de un Ferrari. Después de un rato, y que el video circulara por las redes, pudieron apagar las llamas y retirar el coche del medio de la calzada.
