Los Mossos d’Esquadra anuncian cuatro detenciones de ladrones en Barcelona. Las dos intervenciones policiales se produjeron el pasado lunes día 7 de julio, en los distritos de Sant Andreu y Sarrià-Sant Gervasi. En el primer caso, según ha informado el cuerpo policial catalán en sus redes sociales, fueron avisados por el Grupo de Delincuencia Urbana del barrio de que dos personas se estaban descolgando desde un edificio, hasta entrar a un domicilio particular. Los agentes, de paisano, los esperaron en la calle para detenerlos. Los acusados llevaban varios objetos de valor sustraídos del piso al que habían entrado, que pudieron ser devueltos a sus propietarios.
En el segundo caso, los agentes fueron avisados de un robo con fuerza en el barrio de Sarrià. Pudieron seguir a los sospechosos a través del GPS de unos auriculares que habrían sustraído a la víctima. El seguimiento se inició, de hecho, en Sant Andreu, pero llevó a la policía catalana de regreso a Sarrià. Allí, pudieron localizar a los dos ladrones, y recuperaron tanto el dispositivo electrónico como 3.000 euros, también robados, que pudieron devolver a su propietario.
Operaciones en julio
Durante el mes de julio, los cuerpos policiales de la ciudad han tenido que movilizarse en varias ocasiones para impedir robos y perseguir a sus perpetradores. A principios de mes, los agentes de la Guardia Urbana encontraron una escena especialmente estrambótica: detuvieron a un hombre que intentaba abrir una caja fuerte robada en un parque del barrio de la Vila Olímpica con un martillo y un cincel. Los policías, que patrullaban el barrio, se acercaron alertados por «unos ruidos metálicos». Allí encontraron al hombre, que habría entrado a robar en una cafetería próxima, intentando reventar la caja fuerte. También se había llevado la caja registradora y tres cervezas, que aún llevaba encima cuando los agentes lo encontraron.
