Los Mossos d’Esquadra han detenido a cuatro miembros de una misma familia –uno de ellos menor de edad– como presuntos autores de los delitos de receptación, revelación de secretos y fraudes bancarios. Concretamente, las detenciones se han producido por cometer fraudes bancarios con móviles robados que adquirían en el mercado ilícito. Tres de las cuatro detenciones se produjeron tras un operativo con una entrada y registro en un domicilio del distrito de Ciutat Vella de Barcelona el pasado jueves.
Este mismo lunes se detuvo al cuarto miembro de la familia, sobre quien pesaba una orden de detención vigente. Este operativo, según ha informado la Policía de la Generalitat, se enmarca dentro del Plan Kanpai, la estrategia integral del cuerpo para combatir la multirreincidencia delictiva, que pone especial atención en el ámbito de hurtos y robos.
Los detenidos y los otros presuntos autores adquirían teléfonos robados para acceder a datos confidenciales y operar de forma fraudulenta en cajeros automáticos y, de la treintena de terminales recuperados, 10 constaban como sustraídos en hurtos y robos violentos, y ya se han devuelto 4 a las víctimas. En cuanto a los 21 dispositivos restantes –todos de alta gama– se está comprobando su procedencia y se busca devolverlos a los propietarios en caso de que también hayan sido robados.
Compren telèfons mòbils robats per accedir a dades confidencials de les víctimes i així fer extraccions de diners en caixers automàtics a Barcelona.
— Mossos (@mossos) December 16, 2025
Detenim quatre homes en aquest operatiu que s’emmarca dins del Pla Kanpai per combatre la multireincidència. pic.twitter.com/d4LiZYnGdp
La investigación continúa abierta y los Mossos no descartan más detenciones
Además, los Mossos han detallado que durante el registro se han intervenido once tarjetas SIM de origen presuntamente ilícito que se habrían utilizado para desbloquear los terminales sustraídos y también se han localizado 7.290 euros en efectivo, un ordenador portátil y piezas para cometer los fraudes en cajeros automáticos. La investigación continúa abierta y no se descartan más detenciones.
