Golpe policial conjunto de los Mossos y la Guardia Urbana de Barcelona contra un grupo criminal especializado en robos violentos y comercializar los productos sustraídos a países del norte de África. La banda, han explicado los cuerpos policiales, usaba pisos del barrio del Raval como centros logísticos de almacenamiento. La actuación de la policía consistió en tres entradas y cacheos en tres inmuebles del barrio, donde se pudieron localizar 56 teléfonos móviles, veinte relojes de alta gama, joyas de oro, ordenadores portátiles y dinero en metálico. La policía calcula que el valor aproximado del material decomisado es de 158.000 euros. Siete personas han quedado detenidas por delitos de robo con violencia y receptación.
Destino: el norte de África
Los miembros de esta organización sustraían los productos y posteriormente los libraban a intermediarios que los hacían llegar a la cúpula de la banda. Esta almacenaba el material y después lo distribuía y comercializaba en países del norte de África. Robaban teléfonos móviles, relojes de alta gama, joyas, patinetes, cámaras digitales, y otros objetos electrónicos. Además, los integrantes del grupo actuaban de forma estratégica usando pisos de la zona del Arrabal, que utilizaban como centros logísticos de almacenamiento, gestión, compraventa y traslado de objetos de procedencia ilícita.
La operación lo han llevado a cabo agentes del cuerpo de Mossos d’Esquadra de la Unidad de Investigación y de seguridad ciudadana de la comisaría de Ciutat Vella; efectivos del grupo Titanio; agentes de la Guardia Urbana de Barcelona de la Unidad de Investigación; del Grupo de Delincuencia Urbana; de la Brigada Turno Noche de la Unidad Territorial de Ciutat Vella; y de la Unidad de Refuerzo Emergencias y Proximidad del cuerpo barcelonés.
