La Guardia Urbana ha desalojado este miércoles por la mañana un edificio ocupado muy conflictivo en el distrito de Sant Martí. Se trata de una nave de la calle del Perú, 164, llamada La Kolapsada, de la cual había muchas quejas vecinales por fiestas y conciertos -donde llegaron a concentrarse más de 200 personas-, ruido y numerosos problemas de convivencia, explicó a principios de febrero el TOT Barcelona.
🔴 ÚLTIMA HORA La Guardia Urbana desaloja un edificio ocupado y conflictivo en la calle del Perú, 164, en el distrito de Sant Martí. Imágenes cedidas al Tot Barcelona por Ni Una Plaça Menys Plataforma pic.twitter.com/pPP72EC5X1
— TOT Barcelona (@TotBcn) May 14, 2025
Fuentes municipales han explicado al TOT que la nave, con cinco plantas y azotea, funcionaba como «infrahabitatge». En este sentido, el distrito de Sant Martí tramitó un expediente por infrahabitatge y una vez tuvo la resolución judicial dio orden a la Guardia Urbana para que desaloje el inmueble y, posteriormente, lo clausure. Según el Ayuntamiento, había ocho personas y tres animales. El inmueble es de propiedad privada y en el momento de la publicación de este artículo estaba custodiado por la policía hasta entregarlo a sus titulares.

Desplegados los agentes de la UREP
Tal como se puede ver en las imágenes a las que ha tenido acceso este medio, la policía local barcelonesa ha desplegado un dispositivo amplio, con al menos siete vehículos y los agentes de la Unidad de Refuerzo de Emergencia y Proximidad (UREP), los antidisturbios de la Guardia Urbana. También han hecho acto de presencia diferentes efectivos de los Bomberos de Barcelona.
El edificio ha estado ocupado unos tres años. En febrero del año pasado, el TOT adelantó que desde octubre de 2022 el teléfono de emergencias había atendido 26 llamadas de residentes con diferentes tipos de quejas, 17 de las cuales eran por molestias en el espacio público, cinco por ruidos y cuatro por consumo de alcohol en la calle, según figuraba en una respuesta del concejal del distrito de Sant Martí David Escudé a una solicitud de Junts.

Autocaravanas en la calle de asistentes a las fiestas
Vecinos con los que habló el TOT relataron que las fiestas y conciertos tenían lugar sobre todo los fines de semana y se alargaban hasta las 07.00 de la mañana. Un problema añadido que conllevaban estas actividades era la llegada de asistentes que aparcaban en la calle autocaravanas y vehículos en los que pernoctaban. De vez en cuando, la Guardia Urbana montó operativos para controlar los accesos al inmueble, como ocurrió en enero de 2024.