Un caso de acoso laboral ha hecho tambalear la Universitat Pompeu Fabra (UPF). Tal como ha informado Europa Press, la universidad ha abierto un expediente disciplinario a un catedrático del departamento de Medicina y Ciencias de la Vida. La razón? Se le acusa de acosar laboralmente de cuatro doctorandas de Biomedicina. Por su parte, la UPF ha afirmado que se enteró «de este caso hace unos días y activó los procedimientos internos oportunos». A pesar del expediente impuesto, el catedrático continúa trabajando en la universidad.
En este sentido, ha defendido esta decisión alegando que las denunciantes no tienen, en estos momentos, ninguna relación con el centro educativo. Aun así, ha añadido que «se está haciendo el seguimiento correspondiente».
La actuación previa, pero, podría haber sido bastante diferente. Tal como ha avisado el Sindicato de Estudiantes de los Países Catalanes (SEPC) en un comunicado, estas mujeres «dieron a conocer la situación en la universidad durante los cursos y no recibieron ningún tipo de respuesta efectiva». Aun así, han añadido que este no es un caso aislado. «Son diversas las mujeres que han sufrido acoso por parte de supuestos profesionales de la universidad y que, una vez más, esta no se ha inmutado».
Una camarera se negó a trabajar con sujetadores
Hace una semana se conoció otro caso polémico. Tal como informó el ACN, el Juzgado del Social número 4 de Barcelona estableció que la empresa Almanproduct tendría que readmitir una camarera que había despedido. El motivo del despido, concretamente, fue que la camarera se negó a trabajar con sujetadores, un ‘cullote’ y medias. Según
