Unas 150 personas pasaron la noche en la estación de Sants, en Barcelona, por la cancelación de trenes durante el temporal que azotó Cataluña este sábado. Según informa Protección Civil, la Cruz Roja activó el dispositivo habitual para este tipo de situaciones y llevó recursos para que las personas afectadas pudieran pasar la noche de la manera más cómoda posible. A primera hora de la mañana, con la reanudación del servicio ferroviario habitual, el dispositivo se dio por finalizado y todos los viajeros afectados pudieron ser reubicados.
A primera hora de la tarde del sábado, Renfe decidió suspender todo el tráfico ferroviario de Cataluña ante las alertas rojas del Servei Meteorològic de Catalunya (Meteocat) y la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet). Ante el gran riesgo de inundaciones en buena parte del país, el operador, de acuerdo con la Generalitat y el Centro de Coordinación Operativa de Cataluña (Cecat), optó por interrumpir la circulación de Rodalies, Regionales, así como la alta velocidad. Por “motivos de seguridad”, no se pudo garantizar un servicio alternativo por carretera y se cerraron estaciones para “evitar aglomeraciones”.
El temporal esquiva Barcelona
Finalmente, el temporal pasó de refilón por Barcelona y solo dejó 17,2 litros por metro cuadrado en la estación del Observatori Fabra, 10,3 litros en la de Zona Universitaria o 5,9 litros en la del Raval. La parte más fuerte de la dana descargó con fuerza en el Penedès y en el Garraf y continuó hacia el norte por el Anoia, el Bages y el Vallès Occidental. La capital catalana había decretado por precaución el cierre de todos los parques públicos —también el Tibidabo, el Zoo o el Park Güell—, suspendió todos los actos al exterior de las fiestas mayores y izó la bandera roja en las playas, mientras que todo el personal de limpieza regresó a sus bases esperando que pasara el temporal.
