El expresidente del Colegio Oficial de Veterinarios de Barcelona (COVB) José Antonio Gómez podría enfrentarse a tres años de prisión por apropiarse indebidamente de 1,4 millones de euros. Según ha avanzado 
En concreto, Gómez habría pagado con dinero de la entidad a empresas fantasma por la realización de unas obras que nunca llegaron a producirse. La fiscalía considera que el expresidente y el extesorero de los veterinarios barceloneses abonaron a los otros tres acusados facturas elaboradas por ellos mismos o terceras personas por el importe de 1,4 millones de euros por actuaciones que no se hicieron en las oficinas del colegio y de la sociedad mercantil AFV sin el conocimiento ni el consentimiento de la Junta de Gobierno ni de la Asamblea General de Socios.
Estas facturas se habrían abonado entre enero del 2012 y octubre del 2016, a pesar de que se ha podido comprobar que las sociedades de las cuales era administrador uno de los acusados no tenían ni medios ni trabajadores para hacer las obras «que supuestamente hicieron, pero que efectivamente cobraron». Otro de los acusados en esta causa era el encargado de coordinar las obras y llevar personalmente las facturas a las oficinas del COVB hasta que eran libradas al presidente del ente.
Tres años de prisión e indemnización conjunta
Por todo ello y después de las investigaciones pertinentes, el ministerio público pide ahora tres años de prisión para cada uno de los acusados, inhabilitación especial durante el tiempo de condena y nueve meses de multa con una cuota diaria de 20 euros. Además, solicita que los acusados indemnicen conjuntamente y solidariamente al COVB con 1,4 millones de euros, la cantidad de dinero que presuntamente habrían desviado.

