La guardería Les Manetes, ubicada en el barrio de Sant Andreu, se ha convertido en uno de los principales referentes de la fuerte crisis que golpea al sector de las guarderías en Cataluña. Este pasado lunes, las familias afectadas por el cierre de la guardería se concentraron en la plaza de Orfila, a las puertas de la sede del distrito, para reclamar que la guardería no baje la persiana a mitad de curso. A las reclamaciones de las familias también se ha sumado la presión política, que también ha reclamado que se detenga el cierre: «Pedimos al gobierno del distrito de Sant Andreu que inicie o continúe con la mediación entre las familias afectadas por el cierre de la guardería y la familia propietaria del local y de la guardería, con el objetivo de congelar y evitar el cese de la licencia de actividad que otorga el Ayuntamiento y la Autorización que otorga el Departamento de Enseñanza», argumentan los Comunes en una instancia de mediación presentada al distrito.
Los Comunes reclaman al gobierno del distrito de Sant Andreu que tome cartas en el asunto para evitar que las familias afectadas -26 en total- se queden sin guardería a mitad de curso. De hecho, consideran que la administración del distrito debe «facilitar la búsqueda de soluciones para asegurar la continuidad de los niños hasta la finalización del curso 2024/25, ya sea el traspaso del negocio a una nueva propietaria, la continuidad de la actual propietaria con el servicio o alguna otra solución que asegure que los niños puedan terminar el curso con las educadoras actuales y su grupo de niños». De momento, sin embargo, la guardería cerrará este viernes.
Una reclamación que se suma a la petición del síndico
Esta instancia de mediación presentada por los Comunes se suma a la reclamación del síndico de agravios, que ya pidió la semana pasada al Consorcio de Educación de Barcelona que no autorizara el cese de la actividad del centro sin haber recolocado previamente a los niños afectados. De momento, el consorcio solo ha hecho llegar a las familias afectadas por el cierre un listado de guarderías de la zona en que podrían comenzar la actividad una vez Les Manetes baje la persiana. Un listado, sin embargo, que es insuficiente, ya que «no garantiza la escolarización de los 26 niños ni se adapta al número de niños que hay actualmente en cada curso» del centro educativo.
