Un total de 3.709 niños de entre 0 y 3 años no tendrán plaza a jefe guardería municipal (EBM) de Barcelona el curso que viene, según datos del Instituto Municipal de Educación de Barcelona (IMEB) obtenidas por la ACN. Esto supone casi la mitad de las 8.291 solicitudes presentadas y sitúa la demanda atendida en el 55% del total, un nivel similar al de los últimos años. Por otro lado, los datos del curso que ahora ha acabado muestran como la cobertura es bastante más baja en el Eixample (37,2%), Gràcia (45%) y Sants-Montjuïc (47,2%), porque desde el Consistorio se han «privilegiado» barrios «más vulnerables», según el regidor de Educación, Lluís Rabell, que asume que las cifras piden «un esfuerzo» inversor, y promete 647 nuevas plazas de aquí al final de este mandato.
Según los datos de la preinscripción y matrícula del curso 2024-25 obtenidas por la ACN, el próximo curso la red de 105 guarderías municipales acogerá 8.845 niños de 0 a 3 años, lo cual supone solo una de cada cuatro criaturas de este grupo de edad de la ciudad. Una parte importante son matrículas de continuidad, los niños que pasan de curso, y el resto son nuevas matriculaciones. En concreto, se han asignado 4.582 plazas por un total de 8.291 solicitudes, esto es, el 55,2% de la demanda. Por grupos de edad, también ha habido poca variación, I2 sigue siendo el grupo con un nivel más bajo de demanda atendida, el 51% de las 2.497 solicitudes de plaza. A I1 se ha satisfecho el 57% de 4.403 solicitudes, y a I0, el 58% de 1.391.
Los últimos años la oferta pública municipal no ha hecho, sino aumentar, con una red que ha pasado de 35 equipaciones EBM en 2000 a 105 actualmente. Pero las familias que solicitan una plaza a las guarderías han crecido a un ritmo todavía superior. Superada la anomalía de los dos cursos pandémicos en que bajó fuertemente la demanda de escolarización y la oferta pública absorbió hasta más allá del 60% de las solicitudes, este curso se ha devuelto al 55%, un porcentaje ligeramente más abajo que el año pasado (56,7%) y también que el último curso antes de la pandemia (56%).

Por otro lado, Lluís Rabell, asegura que son «conscientes» de estas cifras y admite que «que piden un esfuerzo de desarrollo de guarderías». En este sentido, expone que la previsión del Consistorio es inaugurar antes de que acabe el mandato 4 guarderías, que sumarán un total de 647 plazas nuevas, y dejarían la red pública con una capacidad total de más de 9.200 plazas y 108 equipaciones. Aun así, el regidor dice que en términos de escolarización de esta franja de edad, sumando los sectores público y privado, Barcelona no está lejos del objetivo del 85% que marca la Unión Europea por el 2030. «Ahora estamos en un 72%, y nos vayamos encaminando poco a poco cabe estos objetivos», asegura.
Desequilibrio territorial
Los datos del curso 2023-24 confirman que el distrito con el nivel más bajo de demanda atendida ha sido el Eixample, con solo el 37,2% de las solicitudes con plaza asignada, seguido de Gràcia (45%) y Sants-Montjuïc (47,2%). La otra cara de la moneda es Nueve Barrios, con la ratio más alta, casi el 67% de la demanda es atendida. Y, en segundo lugar, San Martín (65,8%). Los casos de San Martín y Huerta-Guinardó (64,8%) contrastan con el Eixample, puesto que los tres distritos son los que tienen más demanda, pero mientras los dos primeros tienen uno de los porcentajes más altos de cobertura, el Eixample es lo más mal cubierto.
Al respeto, Rabel explica que el «desequilibrio» territorial no es casual, puesto que «se ha privilegiado con más guarderías los distritos y barrios donde hay una mayor vulnerabilidad social, rentas más bajas». Aquí es donde se ha hecho más «esfuerzo inversor» que en otras zonas dónde, asegura, esta carencia queda «en parte compensada por la oferta privada». Aun así, Rabel dice que «se irá equilibrando la oferta» de acuerdo con la demanda. «No queremos crear una segregación a la inversa».

En este sentido, las cuatro EBM que se inaugurarán de aquí a final de mandato estarán bastante repartidas: Cuarteles (San Andreu), Can Carreras (Nueve Barrios), El Mar (Barceloneta) y una cuarta a la Sagrada Familia (Eixample). El Instituto Municipal de Educación de Barcelona, con un presupuesto anual ordinario de 66 millones de euros destinado en la red de guarderías, tiene previsto invertir 14 millones de euros en estos cuatro proyectos programados por este mandato.
Bressols en Lluita
En este contexto, la plataforma Bressols En Lluita, reclama el acceso garantizado a plazas de guardería públicas y también ratios y condiciones de trabajo adecuadas en este segmento de la educación pública. La plataforma la integran entidades en defensa de la escolarización pública de la primera infancia, educadores y también familias, como la de Natàlia González, madre de uno de los bebés que se ha quedado sin plaza por el curso 2024-25 en el Eixample.
En declaraciones a la ACN, González asegura que las consecuencias para su familia y para muchas de las que están en su situación es una gran «incertidumbre» y un problema para la economía familiar. «Lo apostamos todo a la pública, y no fue bien. Como que no tenemos solvencia económica ni familia que se haga cargo de nuestro hijo, ahora uno de los dos tendrá que renunciar en su vida laboral». La primera etapa de la educación infantil (0-3) no es ni obligatoria ni gratuita, pero sí que es algo más asequible que la matrícula de las guarderías privadas, y cuenta con un sistema de tarificación social. Además, desde hace dos cursos, Infantil 2 está parcialmente financiado por el Gobierno con 1.600 euros por plaza y las familias pagan solo el comedor y las acogidas, mientras los ayuntamientos siguen aportando el mismo.