Aprender a programar, entender los fundamentos de la inteligencia artificial, actualizar conocimientos en salud, liderazgo o sostenibilidad, o dar el salto hacia un nuevo sector profesional. Cada vez más personas necesitan adquirir nuevas competencias a lo largo de la vida laboral, en un contexto marcado por la aceleración tecnológica, pero la oferta formativa tradicional no siempre es lo suficientemente rápida y flexible. En este escenario nace Microcreds.cat, una iniciativa coordinada desde el Gobierno de la Generalitat junto con las siete universidades públicas catalanas.
El programa apuesta por cursos oficiales, de corta duración y adaptados a las demandas del mercado laboral, con el objetivo de incentivar la formación a lo largo de la vida. A diferencia de los grados o másters, que requieren años de dedicación, las microcredenciales permiten centrarse solo en lo que se necesita aprender en cada momento. Es una formación flexible y de calidad, para personas adultas con titulación superior o sin ella, con una duración de entre 25 y 375 horas.
Itinerarios formativos personalizados
Las microcredenciales son acumulables, lo que permite diseñar un itinerario formativo personalizado. Una de las claves del éxito es la colaboración estrecha entre instituciones, universidades y empresas, así como la capacidad de crear ofertas formativas flexibles, modulables y alineadas con las necesidades del territorio.
Este enfoque modular abre la puerta a múltiples usos: mejorar el perfil profesional dentro del mismo sector, adquirir habilidades complementarias, preparar una reorientación laboral o simplemente actualizar conocimientos en ámbitos emergentes.
Otro elemento destacado es su carácter oficial. Al finalizar el curso, el alumnado obtiene una certificación digital que acredita las competencias adquiridas y el nivel de dominio alcanzado, de acuerdo con estándares internacionales. Las formaciones pueden llegar a sumar hasta 15 créditos ECTS.

Más de 350 cursos
Actualmente, la oferta de microcredenciales de las universidades públicas catalanas supera las 350 formaciones de corta duración, con propuestas muy diversas. Cada universidad aporta su sello y especialización para construir un catálogo amplio y complementario.
La Universidad de Barcelona concentra parte de su oferta en salud, deporte y bienestar, sin dejar de lado el ámbito social, la empresa o la farmacia. La Universidad Autónoma de Barcelona combina ciencias y humanidades, con cursos que van desde la agroalimentación hasta las lenguas o la filosofía. La Universidad Politécnica de Cataluña pone el foco en la ingeniería, las tecnologías digitales, el urbanismo y las TIC, mientras que la Universidad Pompeu Fabra se estrena con una apuesta inclusiva en educación y lenguaje de signos.
En cuanto al resto de centros, la Universidad de Girona ofrece un abanico transversal que integra liderazgo, inteligencia artificial, sostenibilidad y comunicación; la Universidad de Lleida se centra en las ciencias de la salud y de la vida, con especial atención a la enfermería y la atención sanitaria; y la Universidad Rovira i Virgili conecta la formación con el tejido productivo del territorio, con microcredenciales en logística, análisis de datos, liderazgo y viticultura.
Cómo acceder
Inscribirse es un proceso sencillo. Solo hay que consultar la oferta disponible en el portal Microcreds.cat, donde se recogen todas las opciones vigentes, y formalizar la inscripción directamente con la universidad que imparte el curso.
Las microcredenciales se enmarcan en el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia (PRTR), financiado con fondos NextGenerationEU, como una apuesta estratégica para impulsar la transición digital y ecológica y reforzar la cohesión económica, demográfica, social y territorial.
