La reforma del mercado de la Boqueria comenzará en el verano de 2026 con la transformación de la isla central del pescado, mejoras en la accesibilidad, la nueva distribución de los baños y el confort, y el traslado de las oficinas a la planta baja. Estas obras estarán finalizadas a finales de 2027, pero la mayor parte de la remodelación se ejecutará más adelante y no terminará hasta el próximo mandato municipal, que comenzará después de las elecciones de mayo de 2027. Entre las actuaciones más importantes se incluyen la sustitución del techo de amianto, el refuerzo de la estructura y la renovación de la fachada de la plaza de la Gardunya para abrir un nuevo acceso. En el futuro, se quiere garantizar que un 50% de los puestos sean de comercio tradicional, lo que significará que sólo la mitad de la superficie total del mercado podrá vender productos elaborados.
En octubre pasado, la previsión del Ayuntamiento era que las obras comenzaran en 2025 y estuvieran finalizadas en 2027, con una inversión mínima de 12 millones de euros. La transformación se retrasa, pero el presupuesto se mantiene, informó el consistorio este jueves por parte de la concejala de Mercados, Raquel Gil, y el presidente de los comerciantes, Jordi Mas.
Apoyo del 90% de los vendedores
El martes, la asociación de vendedores del mercado más turístico de Barcelona -con más de 23,2 millones de visitantes al año- aprobó la reforma del mercado, así como la elaboración de un reglamento comercial que debe servir para revitalizar el equipamiento como un equipamiento alimentario singular. El apoyo de los vendedores fue del 90%. Según Mas, «se trata del mejor mercado del mundo y no debe perder su esencia».

1.500 m² de comercio tradicional
Para la concejala, en la Boqueria debe haber panaderías, comercio de proximidad y restauración, que se combinará con una oferta menor enfocada al turismo. La remodelación busca el equilibrio. Al menos el 50% de los puestos deberán ser de comercio tradicional, alrededor de 1.500 m², mientras que el resto de la oferta será de productos elaborados, descontrolada ahora en muchos puestos. De hecho, en la propuesta acordada con los comerciantes se establece que el 53,73% de la superficie sea de comercio tradicional y el 46,27% de productos elaborados. El reglamento —inexistente hasta ahora— entrará en vigor la próxima primavera, después de todos los trámites y las aprobaciones por parte del pleno.
Gil recordó que el mercado de la Boqueria es un edificio patrimonial y que el objetivo es que la parte central del pescado, la fachada de la Gardunya y otras obras interiores estén terminadas en 2027. «Se trabaja en paralelo con la reforma de la Rambla», que debe concluir durante el primer trimestre de 2027. También se irán preparando el resto de los proyectos, pero la retirada de la cobertura de amianto y el refuerzo de la estructura serán en el próximo mandato. Gil recordó que toda la reforma se ejecutará con el mercado abierto.