«Prueba de alerta de Protecció Civil de la Generalitat de Catalunya. No llames al 112, es una prueba. En una emergencia real recibirías instrucciones para protegerte». Este es el mensaje que tendría que recibir todo el mundo que esté en Barcelona, también los que pasen de paso, el próximo 14 de septiembre hacia las 11 horas. El resto de poblaciones de la demarcación de Barcelona también recibirán este mismo mensaje a lo largo de la mañana, lo cual convierte la operación en la prueba más grande que se ha hecho hasta ahora, con un envío masivo que llegará cinco millones de personas. Esta prueba tiene que servir para comprobar que todo está a punto para enviar mensajes reales en casos excepcionales, como por ejemplo si hay un accidente químico o una inundación, con las instrucciones de cómo tiene que actuar la población.
Los envíos se harán en tres idiomas: catalán, castellano e inglés. Posteriormente, la Generalitat enviará una encuesta para verificar si los mensajes han llegado a la población y si ha habido algún inconveniente, como por ejemplo un envío en un idioma que no toca. Esto es porque este sistema «no permite tener un retorno de cuántos móviles han recibido el mensaje», tal como ha apuntado este miércoles la directora general de Protección, Marta Cassany, en declaraciones a la ACN. Este motivo hace necesario el feedback posterior de la ciudadanía. Cassany también hace un aviso importante, puesto que el envío de septiembre se trata de una prueba y en ningún caso se tiene que avisar al 112, hecho que podría colapsarlo. Mientras tanto, el Servicio Catalán de Tráfico informará en diferentes carteles que se está haciendo la prueba para no alertar a los conductores.
Cuarta prueba que se hace en Cataluña
Es la cuarta prueba que hace la Generalitat después de haber enviado este mismo mensaje a Lleida, el Alt Pirineu y l’Aran (28 de febrero), Tarragona, les Terres de l’Ebro y el Penedès (12 de abril) y a las veguerías de Catalunya Central y Girona (27 de abril). En el caso de la prueba en el área de Tarragona, el Procicat tuvo que repetir el envío masivo porque una parte de la población de estos territorios no recibió el mensaje. En este sentido, Protecció Civil quiere asegurarse de que los envíos importantes llegarían sin problemas.